miércoles, 12 de febrero de 2014

LA LENGUA DE LOS MOZÁRABES VALENCIANOS


Per Juan Ferrando Badía (q.e.p.d.)

Frente a la pretensión de los pancatalanistas de que los valencianos hablamos nuestro idioma gracias a las enseñanzas de las huestes catalanas se nos presenta, de inmediato, un interrogante: ¿Cómo pueblos conquistados por catalanes, como por ejemplo Vall de Almonacid y Castellnovo, hablan castellano?, ¿y cómo pueblos conquistados por aragoneses, como por ejemplo, Burriana, Almácera, Foyos, hablan la lengua valenciana?, y ¿Cómo pueblos que continuaron siendo gobernados por leyes musulmanas y por árabes, establecido ya el reino cristiano de don Jaime, - y que no tuvieron influencias ni aragonesas ni catalanas – hablan la lengua valenciana?. Ahí está el caso de Serra, Vall d’Uxó, Ahín y Eslida.
Ciertamente el idioma valenciano actual no es el romance que hablaban los mozárabes valencianos sino su desarrollo y perfeccionamiento. Y ciertamente el romance que hablaba Jaime I no sólo no supuso barrera alguna para el entendimiento y convivencia con las poblaciones conquistadas sino todo lo contrario, pues como podemos constatar en la propia Crónica del rey don Jaime denominada también Llibre dels feyts, el citado don Jaime mantuvo conversaciones directas con mozárabes valencianos sin intérpretes de ninguna clase. Y así el rey don Jaime - como relata en su Crónica – mantuvo conversaciones directamente con el pueblo y los notables de Peñíscola no sólo eran conocedores del árabe sino que también sabían hablar una lengua análoga al romance de don Jaime, es decir, la lengua de los mozárabes que era bastante parecida a la de los aragoneses.
Si las jarchas mozárabes son un monumento vivo y permanente del habla de los mozárabes valencianos – bajo el dominio árabe – como han subrayado autores de gran prestigio como Dámaso Alonso y Menéndez Pidal que reconocen que son un precedente de nuestra literatura muy anterior al Poema de Mio Cid, sin embargo creemos, que aparte del testimonio científico de Simonet, es la Crónica de don Jaime I el punto de partida en el que hemos de asentarnos para demostrar que la mozarabía valenciana existía con un “romance” peculiar y precisamente por ello facilitó la conquista de los reinos taifas valencianos por don Jaime. La algemia o aljemia era la lengua propia de los mozárabes valencianos.
Y como conclusión de lo que estamos afirmando nos podemos preguntar con el miembro de la Real Academia Española Torcuato Luca de Tena (fallecido en 1999): ¿Qué idioma se hablaba en la costa celtíbera del Levante español durante los casi siete siglos de dominación romana?: el bajo latín, ¿qué lengua se habló durante los casi tres siglos de dominación visigoda?, lo mismo: el latín corrompido que “empezó a decaer y a adulterarse desde la llegada de los bárbaros del norte como sucedió en todo el país”, según palabras de don Roque Barcia. ¿Qué lengua se hablaba entre los cristianos durante los cinco siglos de ocupación islámica del reino de Valencia?, ¿tal vez el árabe? “Hasta los niños de las escuelas – dice Luca de Tena – saben que no es así. Se siguió hablando lo de siempre: un idioma romance, hijo del latín, con notables influencias de otros dialectos latinos como el castellano y de otras lenguas más cultas como el propio árabe”. Y continúa diciendo Luca de Tena: “Pero lo que más interesa señalar aquí es que el rey cristiano se asienta en un territorio en el que se hablaba una lengua romance propia que, al igual que el catalán y el mallorquín, había ido evolucionando y forjándose en sus largos períodos de aislamiento, con independencia de las otras. Estas lenguas latinas de la España oriental eran ya entonces muy diferentes entre sí; más probablemente de lo que lo son ahora, pues la literatura valenciana de finales del Medievo y comienzos de la Edad Moderna (Ausias March, “El Consulat del Mar”, “Tirant lo Blanch”, etcétera) no pudo menos de influir en el catalán, del mismo modo que la poesía y literatura catalana del siglo XIX no han podido menos de influir en el valenciano; a lo que hay que sumar, además, la influencia común del castellano sobre ambas, colaborando todo ello a acortar unas distancias fonéticas y de sintaxis y vocabulario que eran entonces difícilmente salvables”.
Y Simonet dice expresamente: “Nuestros mozárabes, dando gallardas muestras de su capacidad, su ingenio y aplicación y acomodándose a las difíciles circunstancias de su largo cautiverio, cultivaron ambas lenguas y literaturas sobresaliendo así en árabe como en la hispana-latina, pero sin olvidar por eso la suya propia. De lo cual dan fe las notas y escolios arábigos que se encuentran en muchos códices latinos de procedencia mozárabe, probando que hasta los cristianos arabizados entendían y manejaban los textos escritos en lengua latina”.
Juan Ferrando Badía. Catedrático Emérito de Derecho Constitucional y Ciencia Política. Universidad “Rey Juan Carlos” (Madrid). Doctor Honoris Causa.

* Articul publicat en el periodic “Diario de Valencia”, el 5.4.2003.

No hay comentarios: