miércoles, 22 de octubre de 2025

JAUME ROIG

 


Vicente L. Simó Santonja

15.12.06 | 00:00. Archivado en Columnas

Quedaría truncada la información de ayer sobre la referida tertulia, porque podría incluso pensarse que nunca existió y que tan sólo se debe a su gracejo e ingenio el "pintar" una de esas tertulias, que deberían ser frecuentes en tales tiempos (no olvidemos, mediados del siglo XV), y no sólo en la aristocracia, sino en la alta burguesía. Lo importante es que existía la afición al cultivo de las bellas letras.

En el Prólogo a la primera edición (1531), leemos: "De hon, per haver succehit lo desig nostre per los maravellosos merits, riques sentencies, fructifers consells e sans avisos e documents de la davall scrita obra, en la adibtio de aquella, havem sobre los debils muscles de la nostra faca habilitat imposat lo fexuch i dificil carrech del portar al motle de la graciosa stampa, en la sua original lengua e primitiva composició, lo suprem edifici traçat, compost y perfectament fundat per aquell doctissim, molt elegant, digne de perpetua memoria e universal comendatio, lo magnifich y reverent mestre Jaume Roig, mestre en Arts y doctor en medicina, compatriota nostre, les odoriferes y fragants flors del qual verger de la sua scientifica y virtuosa experiencia foren per ell discretament collides y en ramellets de amorosos versos ab los fils de la fina seda de molta elegantia concertadament posades". Creo que deberíamos seguir el consejo de Onofre Almudever (1561), respecto de sus sentencias, avisos y ejemplos: "Mastega'ls y gusta'ls/ rumia'ls mil voltes./si vols ben entendre/ sos fraus y revoltes".

En todo caso, Jaume Roig (1402¿?-1478) es un hombre del siglo XV, anterior al 1490-1500, que muchos investigadores consideran la cima del Renacimiento (italiano). Fue un gran Humanista que acercó el hombre al hombre. Médico en varios hospitales de Valencia: d'En Clapers, Hospital General, d'En Bou, de Sor Isabel de Villena, de los Dominicos. Su libro es un tesoro del vocabulario valenciano sobre enfermedades, medicamentos, instrumentos, plenes curativos, síntomas y otras denominaciones referidas a la salud. Sin duda fue un gran intelectual con amplios conocimientos teológicos, filosóficos, de escritura, históricos y científicos. Contrario al curanderismo y la superstición se atrevió a ridiculizar al famoso Averroes ( 'Aben Roys,/ qui u (ho) descrivi,/ algun mati/ ho somnià').

Por si fuera poca la preocupación por el hombre, en sus versos 15.680-15.693 explica su dieta, antecedente de la mejor endocrinología moderna: 'Yo cave'n l'ort/ per mon deport,/ apres passeje/ fins que fameje;/ dijous, diumenge/ he dimarts,/ menge/ carn sense greix/ los tres jorns, peix/ l'u, aygua i pa;/ si no'm trop sa/ pa i vi vermell'. Hacer deporte , cavando el huerto; pasear hasta tener hambre; tres días (martes, jueves y domingo), carne sin grasa; dos días (lunes y miércoles), pescado; y un día, abstinencia a pan y agua. Pero atención, que si el día de abstinencia (viernes), uno no se encuentra sano, o sea se siente enfermo y delicado, la abstinencia sustituye el agua por el vino: pan y vino tinto. Para el siglo en que vivió, setenta y seis años, debía equivalen a superar hoy los cien. Conviene la dieta, pero yo recomiendo además de ésta física o corporal, otra espiritual de sólo agua y pan (sin excepciones alcohólicas tintas) para todos aquellos, que leyendo a Jaume Roig se quedan en la epidermis de su obra (gracia, sátira, burla), incapaces de calar su Humanismo.

 

No hay comentarios: