Por:
Jose Vte. Gomez Bayarri
18.07.07
| 23:53.
La
Academia Administrativa de la Lengua, ‘la AVL’ se planteó el tema de la
denominación que correspondía asignarse a la lengua vernácula de los
valencianos. Unos apostaban por la que ellos consideran la denominación
académica ‘lengua catalana’; otros, optaron por la formula híbrida
‘catalán-valenciano’; una minoría prefería nombrarla ‘valenciana’.
Cabe
recordar que el proceso histórico de la fidelidad lingüística se plasma en la
identificación onomástica que a lo largo de la historia bajo-medieval se le
otorgó a nuestra lengua genuina. Primeramente se le denominó, en un período de
transición onomástica, ‘romanç valencià’ y posteriormente, en el período de
consolidación, se generalizó el nombre de ‘lengua valenciana’.
Son
numerosos los documentos que demuestran el testimonio de una incontrovertible
conciencia idiomática valenciana a partir del siglo XIV. Los escritores
valencianos se expresan, y así lo hacen constar, en múltiples ocasiones en
‘lengua valenciana’ particularizada y singularizada.
Los
primeros textos documentados, que conocíamos, que reflejaban específicamente el
gentilicio ‘valenciana’ para identificar a nuestra lengua autóctona eran: El
testimonio de Antoni Canals ‘vulgada lenga materna valenciana’ (1395). El Acta
Notarial de 28 de junio de 1408, de un pleito entre la villa de Onda y la Orden
de Montesa, ‘vulgar lengua valenciana’. El Acta de 6 de junio de 1412 de los
diputados y notarios asistentes al Compromiso de Caspe, ‘in ydiomate
valentino’.
Y
entre los documentos pontificios, uno correspondiente al pontificado del Papa
valenciano, Alejandro VI, datado en 1504, donde se lee ‘lingua vulgari
valentini expeditarum’.
Hasta
no hace mucho tiempo el primer testimonio, donde aparecía la expresión ‘llengua
valenciana’ sin ningún calificativo, y que además une los conceptos de
conciencia idiomática con el de conciencia nacional, es en el ‘Prólogo’ de la
obra ‘Libre de Tresor’ de Guillem de Copons, correspondiente a 1418. Este
sentimiento nacionalista valenciano le indujo, asimismo a Joanot Martorell, en
el ‘Prólogo-dedicatoria’ del ‘Tirant lo Blanch’ (1490) a unir el binomio
‘lengua’ y ‘nación valenciana’.
Estas
fechas debemos retrotraerlas a raíz de la aparición de nuevos testimonios.
La investigación nos depara sorpresas. Un artículo publicado el 27 de noviembre
de 2005 en el ‘Levante-Mercantil Valenciano’ señalaba que la primera referencia
al habla propia de los valencianos se había descubierto en un documento
menorquín que recoge un proceso jurídico contra un tal Gil de Lozano, en el que
se hace constar que la madre de éste -Sibila- hablaba en ‘valencianesch’,
porque era de Orihuela, sin entrar en consideraciones lingüísticas. Esta
denominación no se había registrado hasta ahora. El documento está datado entre
los años 1343 y 1346.
El
Diario Valéncia Hui publicaba, el 10 de julio de 2007, un artículo de Agustín
Galbis que recogía el comentario expositivo del ‘Liber amici et amati’, de
Ramón Llull, redactado por un discípulo, en latín. El texto se encuentra en el
folio 34vº del manuscrito ‘N-250, sup’ de la Biblioteca Ambrosiana de Milán y
afirma:
“Ista expositio excepta fuit ex magno volumine in lingua valentina composito
per quemdam discipulum Raymundi. Inceptum Valentie mense decembris et finito mense Martii
anni 1335. Laus Deo.”
Consecuentemente,
la denominación de ‘Lengua Valenciana’ ya se constata, en un texto latino, en
el año 1335, es decir, 60 años antes del documento ‘Prólogo-Dedicatoria’ del
manuscrito de Valerio Máximo, donde Antoni Canals constata la especificidad del
gentilicio ‘valenciana’ en contraposición a ‘catalana’ para designar nuestra
lengua autóctona.
Y
no será el último documento que demuestre la conciencia idiomática de los
valencianos desde la Baja Edad Media.
No hay comentarios:
Publicar un comentario