martes, 23 de septiembre de 2014

EL NACIONALISME CULTURAL VALENCIÀ




E
ls valencians tenim una consciencia clara de que tenim una historia, una cultura, unes institucions i una llengua,  que si en l’epoca migeval  la catalana va ser la mateixa que la valenciana fon degut, com escrigue J.M. Guinot i Galan (Las Provincias, 24.1.88), ”perque Valencia i el valenciá per raons sociologiques, politiques i principalment lliteraries (els classics valencians) s’havia erigit en llengua standart”. Qui va donar carácter de llengua lliteraria foren nostres classics valencians i, per aixo, el català existi i cobrá dignitat partint de nostres classics...  Atra cosa es lo que en posterioritat ha succeit i lo que ha vingut ocorrint des de la Renaixença catalana hasda l’actualitat... Pero aço es atre cantar.

Un proyecte per al valencianisme politic.

Qualsevol proyecte de futur per al poble valenciá deu arraïlar-se  en el passat. Tot canvi o revolucio al marge del poble está condenat al fracas. Una sociedad que haja perdut o perga sa memoria historica dificilmente podra reconstruir-se. Una comunitat que vullga tindre un proyecte sugestiu  de vida en comu -al dir d’Ortega i Gasset- no pot basar-se en una comunitat dual o plurinacional antagonica, perque,  mes tart o mes pronte  tendrá a autodestruir-se...., a seccionar-se. Tot estat plurinacional que no tinga vocacio vertebraora, que no estiga uniformá, porta en lo seu si la raïl de sa propia destruccio. Ad este respecte, la tesis fusteriana partidaria de l’existencia de dos comunitats culturals antagoniques, incompatibles i irreductibles coexistents en l’Antic Regne de Valencia es desintegraora, i certament reductora i apoquiora de la gran obra de Jaume I. Els pancatalanistes defenen que la Valencia “castellana(¿)” pase a formar paart de Castella y la valenciana de Catalunya. Esta seria la teoria partidaria d’una interpretacio antagonica de l’historia del poble valenciá.

No pareix, no es aconsellable, que les coses hagen anat ni deguen anar per eixos camins..., que certament debilitarien la presencia dels valencins en el conjunt de l’Estat Espanyol.

Per raons cientifiques, historiques i tambe politiques no podem acceptar l’interpretacio antagonica ni tampoc “criolla” o dual, de nostra historia, encara que en  est ultima teoria  es propugne  l’armonia entre abdos comunitats i cultures.

Els que propugnen la tercera via no es plantegen el coneiximent de la intrahistoria valenciana per a, des d’ella, vore si en realitat l’afirmacio de Fuster de que n’hi ha dos cultures antagoniques es certa  o, pel contrari, cap una interpretacio mestiça i no criolla de nostra historia, encara que insistixc, siga bilingüe. La tercera via afirma que existixen dos cultures que son les dos peces d’una mateixa tisora, pero, partint, de que son dos coses. ¿Es cert que n’hi ha dos cultures diverses i antagoniques? ¿O en realitat es una unica cultura valenciana, trasunt d’una mateixa realitat economico-social, encara que bilingüe?. Yo m’incline per est ultima afirmacio.

N’hi ha que profundisar en l’historia de Valencia de l’epoca prejaumiste, que está determinant tota la super estructura cultural, nostres pautes de conducta. L’historia de Valencia te que ser interpretá globalment, tenint en conter les epoques pre i jaumistes. Ningu pot dubtar que l’estructura economica agricola valenciana es fonamental per a la correcta interpretacio de nostra historia. I pense’s que les bases de nostra organisacio economica es troben en l’epoca romana i, fonalmentalment, en l’arap. El Rey En Jaume ordená i tolerá que en Valencia se regira tot segons anscentral costum, cas del Tribunal de les Aigües, (orige arap) per citar un eixemple. Protegi a araps i judeus en ses mesquites i sinagogues. No s’enten l’epoca jaumiste sense la pre-jaumiste. S’impon una interpretacio global del poble valenciá. Deu de ser una interpretacio autoctona: existix un unic poble -el poble valenciá- en una historia vixcuda en comu, en uns condicionaments economics tambe comuns i, per tant, en una super estructura cultural deferenciá, trasunt d’eixa realitat  economica, social i historica. El bilingüisme existent no implica, ni te que implicar, en modo algu, la realitat de dos cultures. Es de sobra sabut que la llengua es fonamentalment un  element d’intercomunicacio social i, per tant, un reflex i, a sa vegá, un factor de cultura.

                                                           Joan Ferrando i Badia – Març del 2.001                                                                                           Catedratic Emerit de Dret Constitucional i Ciencia                                                                Politica. Universitat “Rei En Joan Carles” Madrit.                                                                Doctor Honoris Causa.


EL MOZÁRABE DE CADA DÍA

EL MOZÁRABE DE CADA DÍA

Ricardo García Moya

El catalanismo propaga que la carencia de textos en ro­mance valenciano de los siglos XI o XII es algo que demues­tra la inexistencia del mismo. ¡Qué graciosos son! Olvidan que el Reino estaba ocupado militar y culturalmente por is­lámicos, siendo el árabe la len­gua que ahora llamaríamos oficial; sólo las tímidas jarchas  y algún documento diplomáti­co transgredían la regla. Tiem­pos de hambre y espada, el pa­pel era rareza oriental y los mozárabes bastante hacían con subsistir. Incluso en la zo­na cristiana, donde el castella­no era la lengua vehicular y el latín la diplomática, científica y eclesiástica, un idioma vivo como el vasco apenas dejó testimonio escrito antes del año 1517.

Del mozárabe anterior al 1238 quedan huellas que la in­mersión trata de camuflar o sustituir. En la academia ca­talana Canal 9, fingiendo na­turalidad, repiten machaco­namente los castellanismos catalaneros robatori, robar; despreciando furt, furtar. No es casual, todo está programa­do. Según Corominas: “furt es antiguo, genuino y, sin nin­guna duda, heredado del mo­zárabe del Reino de Valencia; del latín furtum, robo, deriva­do de fur, ladrón” (DELLC); y añade esta puntualiz ación: “en el Reino de Valencia, ya al fin del siglo XIV el viejo moza­rabismo se abría paso en el uso común” (ibid.).

El etimólogo sitúa entre 1380 y 1400 el triunfo del viejo mozarabismo valenciano fac­tor que explica la derrota de formas provenzales que per­durarían en el romance cata­lán hasta la influencia de los clásicos valencianos. También surgieron pequeñas diferen­cias sintácticas entre las neo­latinas hispánicas; p.e. en el uso de pronombres átonos, a la construcción valenciana «li la dona” se opondría la cas­tellana “se la dona” (arcaísmo verbal), y la catalana “la hi do­na” (Lleal,C..La formación de las lenguas, Barcelona 1990). De igual modo, las traduccio­nes ponían veto a vocablos considerados bárbaros. Fray Antoni Canals, consciente de la diferenciación lingüística tras vivir y estudiar en Lérida y Barcelona, prescinde de la voz gayre (con y en el siglo XIV) como valenciana, usando en su lugar molt y prou. Un si­glo después, en el primer dic­cionario impreso en España, ya no se la considera ni arcaís­mo adjetival o adverbial valen­ciano, adoptando en su lugar molt y prou (Libera. 1489).

Hacia el 1390, con la fusión del antiguo mozárabe (Coromi­nas dixit) y la creación de léxi­co y morfosintaxis valencianos, nuestros antepasados cons­truían su propio idioma. El ci­tado Antoni Canals ya cincela­ba sustantivos abstractos con la terminación actual: “a vos­tra altea» (Trad. Valeri Máxim, a. 1393), oponiendo a los caste­llanos altesa i bellesa los valen­cianos altea y bellea. También utilizaba el clásico pronombre “yo” (no el catalán jo, que tan­to gusta al DV en el Parle Vosté), y mantiene el culto adver­bio “hui”, no el avui catalán. Esta “secesión” idiomática no acaecía el 2001 promovida por una columna de tías marías, el GAV o UV; sino en el 1390, auspiciada por latinistas valen­cianos que no vivían del para­sitismo institucional.

Nuestro idioma ha seguido creando léxico y acepciones singulares que, en algún caso, enlazaban con el viejo mozára­be. En el vituperado siglo XIX hallamos neologismos distan­ciados semántica y morfológi­camente del étimo medieval: furgadents, furgaestores, fur­gastillo, furgadura, furgaore­lles, etc. Algunos los recogió Escrig (1851), y Corominas los analizó; p.e., de furgamander destaca que es “derivat de l‘equivalència mossárab de furgament» (DELLC). Lamentablemente, desde la ocu­pación catalanera del Reino, está prohibida crear léxico sin permiso de nuestros amos del Institut d´Estudis Catalans.

La Generalidad está espongiforme por priones culturales que mutan lo valenciano en catalán. En la Universidad en­gordan los más activos: p.e., el mallorquín Roselló, experto en apóstrofos y colaborador de la Historia de la Marina Catalana (Ed. Eliseu Climent), donde las galeras y atarazanas del Reino figuran como catalanas. Otro es el prodigioso Herr G. Hauf, que hizo hablar en castellano a los malos y en catalán a los buenos; su última hazaña ha sido catalanizar el manuscrito Speculum Animae de Isabel de Villena. Entre la peonada indi­gena destaca Martí Mestre, doctor Caníbal que devora ches y normalitza hasta el nombre de escritores como Melchor Fuster en politizados ensayos donde repite una y otra vez que “Melcior Fuster usàs el catalá”(A sol pots, 1995). Tam­bién culebrea el gudari Mikel de Epalza, con su traducción del Corán al catalán, rememo­rando que en el siglo XIV el rey Pedro IV encargó otra “traduc­ció catalana”(?) del Corán (Epalza; Avui,13-II-01). Por fa­vor, señor Micalet d´Epalsa, no cuente chistes malos. Jamás pidió este rey una traducción al “catalá” del Corán o del Zen­davesta. De todas formas, ¿Po­dría decir en qué archivo está depositado el documento? No le pedimos un texto mozárabe, sino de la época en que los va­lencianos ya habían introdu­cido el papel en el condado de Cataluña. Eskerrik asko, señor Micalet.

A mayor altura está Juan y Medio. Entre risas enlatadas, los niños se aplastan el cráneo contra el suelo (risas), magrea a la negrita (risas), y le dice: “No tienes paquete» (risas), “no eres negra, eres un lunar” (risas). Historiador y medio, ex­plica que en tiempo de los Re­yes Católicos no existía España, “sólo se sentían catalanes, ga­llegos...”, aunque no cita a los valencianos. En el 1500, por lo visto, no existía ni el Reino de Valencia ni España ¡pero sí Cataluña.! (Canal 9, 14-2-2001) El doctor y medio explica que “sólo en el siglo XVIII aparece lo de llamarse españoles”.¡Qué raro! El catalán Carbonell escribió “Croniques de Espa­nya” en tiempos de los citados reyes; y los valencianos, galle­gos, vascos y catalanes que con­quistan Italia son llamados y se llaman a sí mismos españoles. Quienes reinaban en 1500 no eran arzallus o pujoles, sino Isabel y Fernando.

Volviendo a los mozárabes. Hay una arriesgada teoría de Tovar por la que boniato y mo­niato vendrían de un mozara­bismo de origen griego. Hay dudas, pero lo cierto es que en idioma valenciano tenemos una expresión apropiada para quien dice disparates: “Eixe chicot es un moniato”. Y si los dice con malasombra, Moniato y Mig.

Diario de Valencia 25 de Febrero de 2001


EL MOTIU POLITIC DEL PANCATALANISME


Colectiu Valldaura.
La Real Academia Espanyola front a la Llengua Valenciana.
El motiu pel que els pancatalanistes volen que la llengua valenciana siga un mero dialecte del catala es purament politic. Les persones interesades NO VOLEN "desmembrar el País Valenciano de la comunidad idiomática v cultural catalana". Afirmar que la Ilengua valenciana no es dialecte del catala es, per ad ells, "un intento" contrari a la finalitat política que perseguixen que existisca una comunititat catalana dins de la qual estiga Valencia.

No existix una Comunitat Catalana que englobe a la valenciana, ni jurídica o llegal, historica, ni idiomatica, ni cultural.

A.-Valencia, historicament, mai catalana.
En cap moment de la seua historia Valencia ha segut una part de Catalunya. Ni en temps anteriors a la Reconquista. ni en ella quan Jaume I creá el Regne de Valencia en 1'intencio clarissima de que fora independent de tot lo que era el Regne d’Arago i els seus contats de 1'orient aragones. El Regne de Valencia tenía tan sols vinculacio a la seua persona real i a les persones dels seus descendents, en la "Corona d'Arago", reunint-se les Corts a on manava el rei, pero independentment de les atres.

I no trobarém mai en temps posteriors res que faça pensar ni de llunt en una vinculacio historica de catalans i valencians.

B.- Valencia mai llegalment catalana
En cap moment, ni abans ni ara, ha hagut Ilei alguna que unira a Valencia i Catalunva. Tan sols la pertenencia de les dos Comunitats autonomes a Espaya. En l’ordenament juridic espanyol no hi ha cap de vinculacio jurídica que supedite unes autonomies ad atres, ni que les vincule especificament de forma diferent a les demes. Es mes, l’Estatut d'Autonomia de la Comunitat Valenciana es va obtindre contant en els vots reglamentaris de les tres provincies que la constituixen. En canvi, l'Estatut d'Autonomia de Catalunya no es va obtindre aixina, llegalment, perque Tarragona no arriba al numero de vots necessaris i es va tindre que acodir a una argucia llegal per a poder donar a Catalunya el seu Estatut, que estrictament no havien d'haver-li donat. Catalunya no ha pogut absorbir a Valencia, com hagueren volgut i intentat si en Valencia no haguera eixit l'Estatut i si que ho hagueren tret en Catalunya. Pero el fet es que Valencia es Comunitat Autonoma, en mes resposta popular que la que va tindre Catalunya.

C- Valencia mai culturalment catalana.
Es aberrant afirmar que Valencia i Catalunva tenen la mateixa cultura.
El conjunt d'activitats, comportaments i creencies que componen I'entramat vital d'un poble es la Cultura, com afirma el Prof. D. Juliá San Valero Aparisi: la serie de creacions materials, les solucions i creacions sociologiques i les espirituals de arts, ciencies, creencies, llengua en un conjunt organic, com diu Ortega, i dinamic, com recalca San Valero.

Observant i estudiant este conjunt que constituix la Cultura dels dos pobles, es evident que no es solapen ni coincidixen. Son clarament diferents i distinguibles.

L’idiosincrasia del poble valenciá es distinta i en moltes coses contraposta a la dels catalans. No fa falta aportar autoritats que ho confirmen. Salta a la vista.
Les manifestacions culturals valencianes tenen una qualitat, una varietat. unes formes. unes caracteristiques, que es distinguixen individual i colectivament de les que puguen sorgir en Catalunya.

Clar está que, volent Catalunya absorbir a Valencia, está gastant molts esforçs en propagar falsament que les manifestacions culturals valencianes son "catalanes".

D'una forma que, si no fora trágica, sería risible, han arribat, i continuen fent-ho, a atribuir a Catalunya les abundoses maravilles de tot lo valenciá: l'art arquitectonic (¡Llonja!), pictoric (¡Sorolla!), gastronomic (¡paella!), la ceramica (¡Manises!), i sobre tot, ignominosament, els classics de la llengua valenciana.

Se1s atribuixen. Pero es fals. No son catalanes les manifestacions de la Cultura Valenciana. Valencia no ha segut mai culturalment catalana.

D.- Valencia mai idiomaticament catalana.
"El nom de catalá aplicat al propi idioma 1’admeten de bon grat tots els rossellonesos, els eivissencs, i també els mallorquins cultes, pero els valencians generalment s'hi resistixen. Mallorca presenta alguns eixemples medievals de la introduccio del nom de catalá per a la Ilengua, pero Valencia no cap" (Sanchis Guarncr. M., "La Ilengua dels valencians".p.21-22) Sanchis Guarner, a pesar de ser catalanisador, va puntualisar una cosa molt be: als intents d^introduir este nom -catalá- els valencians sempre s'han resistit.

L’equiparacio de llengua i cultura, de llengua i comunitat etnica, de llengua i agrupacio política. está sempre al servici d'ideologies agressores, racistes. Hitler l'utilisà per a l'absorcio de nacions acostades dient: "Si parlen alema son alemans". Dient-ho, invadi un pais que parlava chec. La progressio de passos que es donen es molt clara, i aplicant-los a 1'agressio que patix el valenciá son:
Primer. Que el valenciá siga dialecte del catala. Si aço es conseguix i s'accepta, encara que no ho siga, es passará al segon.

Segon. En Valencia es parla el catala, perque qui parla un dialecte d'una llengua, parla eixa llengua.
Tercer. La cultura de les terres a on es parla catala es cultura catalana, i sempre ho ha segut.
Quart. Tenim, per tant, una gran "nacio" de llengua i cultura catalanes. els "Paíssos Catalans". encara diferenciats, pero...

Quint. Encara falta un atre pas: conseguir que eixos paíssos formen un "Estat", completant-se aixina el proces d'absorcio del "País Valenciá" per la "Gran Nacio Catalana", que es lo que en veritat pretenen.
Com pot vore's, tot este caramull de distorsions i destarifos de concepte no es ciencia. Es 1'unic cami que tenen per a conseguir la finalitat política que pretenen. El problema no es cientific, com volen fer creure. Es absolutament politic. Es fruit de 1'idiologia expansionista del pancatalanisme: es fonamentalisme.

Ho expressa molt be D. Federico Jimenez Losantos en u dels seus "Comentarios Liberales" (ABC. 4/9/94. p.20):

"En cuanto al expansionismo, otra característica del fundamentalismo nacionalista en la vieja Europa, ahí está el irredentismo vasco reclamando Navarra y algún pedazo de la Rioja o Cantabria. algo menos que el pancatalanismo, que aspira a merendarse la Comunidad Valenciana. las Baleares y un par de comarcas aragonesas... "

E1 fonamentalisme que considerem com a un perill molt gran en atres nacions, el tenim aci en representacio ben complida des de fa anys, i 1'estem patint en Valencia. No vore-ho es presbicia. No voler vore que l’accio pancatalanista en Valencia es política, nazista o fonamentalista, es ceguera. No hi ha pijor cego que el que no vol vore.

El dialectisme del valenciá que pretenen está per demostrar. Tan sols está assunit per alguns com a dogma, per a criteri d'autoritat. Notem que el criteri d'autoritat no es cientific, es fonamentalment acientific.

Les opinions de llingüistes professionals son opinions, no son ciencia. Estes opinions arribaran a ser una hipotesis operativa si es fonamenten metodologicament en un tractament valit. Si s'accepten com a veritat indiscutible i inmutable, es convertixen en dogma, es  dir, en anticiencia. No ha hagut cap de tractament metodologicament vafit que fonamente l'afirmacio de que el valencià es dialecte del catala. No aporten raons ni estudi metodolof;ic. Per que no poden.

Pero afirmen eixa opinio, s'extranyen de que no s'accepte, els causa sorpresa de que es pose publicament en dubte, i pareix que s'esgarren les vestimentes com si d'una heregia es tractara: Es que per ad ells es dogmatic, no es pot discutir, no es pot raonar. Es la posicio que está mes Ilunt de la ciencia.

Llengües d'orige compartit poden oferir el fenomen del parentesc o contigüitat llingüistica podem observar entre la llengua valenciana i el catala. Pero en el "dogma" catalaniste del valenciá s'establix la confusio entre "contigüitat" i "identitat" llingüistica. donant-li ademes el de "dependencia dialectal". A pesar de que ninguna llei llingüistica avala estes idees. En tots els casos de contigüitat no discutix ningu que les dos Ilengües contigües son llengües. Tan sols el cas valenciá es diferent:
El valencid es !'unica llengua que está somesa a un proces d'absorcio, despres de l'etapa hitleriana en Yugoeslavia, absorbint els de Serbia la llengua croata.

La delimitacio idiomatica s’establix per lo que en llüigüistica es diu "traços pertinents de diferenciacio", es dir que s'establix per lo que tenen de "distint", no per lo que tinguen de "comu"; afegint-se la cohesio i la lliteratura com a "traços definídors" d'una llengua. La diferenciacio o delimitacio dels sistemes llingüistics valenciá i catala, afectats per la contigüitat, es clara i fonda; afecta a tots els seus subsistemes:
A.- Subsistema lexic.
No es precis que siguen moltes les diferencies lexiques. No es la cantitat. sino la calitat de significacio que tenen en el proces de formacio de la llengua i en la freqüencia d'us. Tenen gran valor com a tracos pertinents de diferenciacio les paraules que no tenen significat propi, com les preposicions, conjuncions, adverbis, determinatius, possesius. personals. numerals, etc. Els noms, calificatius i verps no son tan valorables perque es presten a abundar en sinonins. Ademes s'ha de tindre ben present que els arcaismes no son paraules valencianes: ho foren en son temps, pero ara son fosils valencians, notem que no ho fan perque estiguen en els classics valencians, sino perque son catala vulgar actual. No servixen per a diferenciar o no els sistemes llingüistics.

Com a eixemples indicatius podem citar l'articul masculi i neutre lo (cat. el), determinatiu este (c. aquest), possesiu seua (c. seva), personal vosatres-vosatros (c. nosaltres), numeral deneu (c. dinou). preposicio en (c. a), conjuncio puix (c. doncs), adverbi aci (c. aquí), casi o quasi (c. gairebé)... Les diferencies lexiques que es troben entre el castellá i qualsevol dels seus dialectes, o d'atra llengua, son menors sense dubte que les que hi ha entre la Ilengua valenciana i el catala.

B.- Subsistema_ fonologic.

El fonema es I'unitat minima deterninant de significacions diversificades, l’unitat distintiva mínima que nos pernet diferenciar dos significats. Quant substituim en una paraula un fonema per un atre obtindrem un significat diferent: Canviant el fonema  /n/ de la paraula "nas" pel fonema /p/ convertin-se en "pas", ha variat la significacio.

El sistema fonologic es caracteristic d'una llengua, i en ell son importantissimes les "oposicions fonologiques" perque definixen la seua individualitat en major pes que les lexiques o morfosintactiques. El sistema fonologic valenciá es diferent del catala. El mateix Badia Margarit no vol definir be el catala per les raons que despres eixiran i afirma, tractant dels canvis de significacio. que: "Néamoins, les choses en sont pas toujours aussi claires qu'on pourrait le croire". ("Sons i fonemes de la llengua catalana". Barcelona. 1988. p.19)

Es evidentissim per a tots, encara que no siguen versats en la materia, que el sistema vocalic valenciá, de 7 vocals perfectament definides, totes elles en valor de fonema, es contraponen al caotic sistema vocalic catala, de set vocals toniques i tres atones. En catala. segons M. Palau Martí, les tres atones (la i, la u, i la vocal neutra que no existit en valenciá) son els tres fonemes vocalics del catala.

Badia Margarit no accepta 1'afirmacio cientifica de Palau Martí perque acceptar-ho deixaria fora del "domaine linguistique catalan... grandes regions de la langue" (pensem en Valencia) i estaría en contra de "l’unité de la langue catalane" (p. 4 3 ). O siga que el dogma de l’unitat de la llengua catalana, en la que inclouen el valenciá, es primordial sobre el criteri cientific de distincio de fonemes entre el catala i el valenciá.

En el sistema vocalic, pero sobre tot en el sistema consonantic, hem de tindre present que les diferencies poden desdibuixar-se si l’estudi comparatiu es fa sobre el paper escrit. perque les diferencies reals no apareixen moltes voltes quan s'usen ortografies etimologistes o arcaiques, com les dels catalans i els catalanisadors valencians, pero que son evidents per a qui estudia el parlar viu del poble.

Dites diferencies afecten al modo d’articulacio, a l’introduccio de nous sons en paraules de la mateixa etimologia, a la germinacio, a grups consonantics arcaics, a la perdua o conservacio de diferents sons. Vore "Fonetica de la Llengua Valenciana" de Guinot i  Galan. p. 293-303.

C.- Subsistema ortografic.

 L'interes que tenen els catalanisadors del poble valenciá en que 1'ortografia que usen els que escriuen en valencià siga identica a la de 1'Institut d'Estudis Catalans no es una qüestio trivial. Molt al contrari, es un assunt fonamental per a les seues intencions.

Perque tot sistema ortografic es un compromis entre la tradicio grafica i la realitat fonologica: i un canvi ortografic te una importancia enorme quan afecta a l'articulacio de les paraules entranyant un canvi fonologic.

Qualsevol canvi fonologic afecta a la mateixa identitat i individualitat de la llengua. I si s'obliga a tal canvi ortografic, es ferix el sistema fonologic, pero se’l ferix greument, perque en aço no hi ha ferides lleus.

Per aixo, qui vol absorbir una llengua, primer ha de mutar-la Ilevant-li la seua identitat i individualitat. I es cnnseguix pel cami de ortografia.¡Pareix tan inocent i de tan poca importancia ... !

Pero el veri que du dins tal realisacio es decisiu.

domingo, 7 de septiembre de 2014

EL MORDISCO A MONTPELLIER



Por Ricardo García Moya
Las Provincias 21 de Marzo de 1999

Según Eco, "Ramón Llull era un catalán nacido en Mallorca, autor de obras escritas la mayor parte en árabe y catalán" (La búsqueda de la lengua perfecta. Barcelona 1996). EI semiólogo italiano, amable con la editorial barcelonesa, considera catalán a Llull, a pesar de que no existió ningún estado que se titulara Cataluña en vida del filósofo, muerto en 1316. En sus longevos 84 años, Lulio escribió obras en Montpellier, Mallorca, Roma y en el convento de Vauvert, junto al Sena, pero ni una en Cataluña. Sus años fecundos los vivió en París, aunque residió en Nápoles, Génova, Túnez, Chipre, etc. Súbdito del rey de Mallorca -no del conde de Barcelona- visitó el condado esporádicamente y utilizó en sus tratados el provenzal, latín y árabe.
Cuesta reprimir la carcajada al leer en la Gran Enciclopedìa Catalana que "el Rey de Cataluña Jaime II quiso traducir del catalán al latín un tratado de Lulio". Lo que no dice la GEC es dónde consta que el citado monarca -nacido en Valencia- se titulara "rey de Cataluña" (¡je!), y tampoco aclara qué archivo posee el escrito donde Jaìme II expresa el deseo de traducir la obra "al català" (¡je,je!). Con igual rigor melonero, la GEC quiere hacer creer que Lulio redactó en catalán "L'Art compendiosa", y que escribió la "Retórica nueva" en la misma lengua durante su estancia en Chipre en 1301. Como en el tocomocho, siempre hay crédulos para un timo.
Pasemos a la realidad. EI Blanquerna, por ejemplo, fue escrito en Montpellier, metrópoli universitaria del provenzal usado por Lulio, y capital cultural perteneciente al rey de Mallorca. Pasado el tiempo y con la Ilegada de la imprenta a Valencia, se editaron en ella más incunables lulianos que en cualquier otra urbe europea; entre ellos figuraba el Blanquerna, "traduit dels primers originals, y estampat en Ilengua valenciana". Estas ediciones se leían en círculos humanísticos de Mallorca y Cataluña, dado que la lengua valenciana extendía su benéfica influencia desde la cuña leridana, a cuya universidad acudían los futuros intelectuales de la Corona de Aragón.
Las ediciones valencianas, más comprensibles que los manuscritos provenzales, sirvieron de modelo para la traducción a otras lenguas. Así, en la Universidad de Barcelona se conserva un ejemplar en casteIlano del Blanquerna impreso en Mallorca en 1749. La portada, aparte del kilométrico título de "Blanquerna: maestro de perfección christiana en los estados del matrimonio...", testifica que fue "traducida fielmente del valenciano y de un antiguo manuscrito lemosino, en lengua castellana". Por presbicia o lentes empañadas, los filólogos del Institut d'Estudis Catalans siempre leen "catalán" donde el original dice "valenciano".
Veamos otro ejemplo ocultado por la progresía catalanera. En octubre de 1298, Lulio termina la "Filosofía del amor" en su celda del convento parisino de Vauvert. Como era habìtual se tradujo en 1516 a la lengua culta de la corona aragonesa: "Vernacula valentiae lingua Philosophiam hanc amoris, sive primitus scriptam ab autore...". Este testimonio no lo encontrarán ustedes en las Enciclopedias Valenciana y Catalana, sino en los neutrales historiadores mallorquines del barroco (Disertaciones históricas del Beato Raymundo Lulio. Mallorca 1700, p. 609).
Antes de la Ilegada de la imprenta, el saber de Lulio se extendió por la Corona de Aragón gracias al círculo luliano de Valencia, amparado por privilegios que el rey otorgaba a religiosos como Pere Rosell o comerciantes como Berenguer de Fluxia para "que pudieran divulgar por los reinos de la Corona el Ars Magna". Los manuscritos traducidos al romance valenciano se iniciaron en 1218 con el "Art de confessió", al que seguirían otros como "Els cent noms de Deu", "Blanquerna", "Filosofía del amor", etc.
EI catalanismo -una vez controlado el territorio de Lulio y el valenciano- abre fauces en dirección a Montpellier y toda la Occitania. Están aplicando la estrategia usada con Valencia, es decir: la unidad de la lengua. Así, en la revista del Régimen podemos leer que "el alto nivel de similitud entre catalán y occitano genera un área de comprensión mutua de unos 25 millones de personas" (EI Temps, 15 de marzo, 1999, p. 32) . Si se aplicarán ellos mismos la teoría inmersionista, el catalán sería el andaluz del provenzal, y tendrían que adoptar las normas del idioma del norte, es decir: el lemosín de Montpellier usado por Lulio y Jaume I, pues el conquistador nació en Montpellier y no en Barcelona, como divulga la inmersión.

Con la teoría de "la comprensión idiomática" la Generalidad de Cataluña sueña con mapas que abarcarían el seco Segura y el caudaloso Ródano, desde Valencia a Valence del Delfinado. Aunque tienen miedo de una "valencianització" (p. 26) occitana que rechazara la inmersión. Pero el mayor problema de Occita nia, dicen, lo coiistituye ese "17"% de musulmans, immigrats del Magrib" (EI Temps, p. 26). ¡Qué contraste! Raimundo Lulio amaba a los musulmanes y quería fundar en MaIlorca y Montpellìer colegios donde se estudiara el árabe. Los catalaneros, liberales de boquilla, desprecian a los musulmanes y no saben cómo deshacerse de ellos.

EL MANUSCRITO 1324 DE LA NACIONAL Y LA LENGUA VALENCIANA



Por Ricardo García Moya

El manuscrito 1324 de la Biblioteca Nacional de Madrid (desconocido, creo, por el Constitucional y el Congreso) fue inìciado en mayo de 1693 por Juan de Ayala, un gramático experto en lenguas sagradas y romances. Con caligrafia barroca, Ayala cita el idioma del Reino, recordando que "la lengua valenciana tiene muchísimos vocablos moriscos, de que hago largos índices en obra aparte” (BNM. Ms.1324, f. 227, r). Constituye otro de los innumerables reconocimientos del idioma valenciano y su riqueza léxica por parte de científicos del lenguaje -no políticos ni jueces- antes de 1861  cuando Milá i Fontanals ideó la argucia de Ilamar dialecto catalán al idioma valenciano.

Los largos indices de léxico valenciano han desaparecido y el manuscrito está inconcluso (sólo hasta la dicción coracina), pero basta para constatar que muchas palabras brotaron entre el Cenia y el Segura antes de ser prestadas al castellano, o capturadas por el catalán. Una de las que recoge es la relativa al "conducto de aguas Ilovedizas, voz albelló en lengua valenciana”. De procedencia árabe generó variables humildes como arbelló y arbellonets (juego que se practicaba en las calles de Valencia). Lamentablemente, pese a que arbelló figuraba en diccionarios como el de Escrig (1887) Y Fullana (1921), la inmersibn lo suprimió -como a tantos otros- para forzar la política unidad de la lengua.

Ayala respetaba el origen valenciano de vocablos; por el contrario, el Institut d'Estudis Catalans los captura o censura. La praxis del IEC consiste, grosso modo, en dictaminar que un sustantivo como baladre es murciano, aragonés, almeriense y catalán (Corominas: Diccionario Etimológico, 1987), es decir, no existe en valenciano. No obstante, uno de los primeros documentos donde surge baladre no fue escrito en Murcia, Zaragoza, Almería o Barcelona, sino en la Valencia del siglo XV y por un Jaume Roig amante de la lengua valenciana dels de Paterna, Torrent y Soterna. Ayala también recurre a Jaume Roig como fuente léxica en su ensayo etimológico (que no otra cosa es el manuscrito 1324). AI analizar brete, dice: “Jaume Roig, poeta valenciano, usa la palabra brell por lo mismo que laço o trampa en que cae la caça." Y reproduce versos de Roig en valenciano del Siglo de Oro: "En lo filat/laços e brell" (f. 126 r) Los miembros de/ Congreso podrian comprobar que el clásico articulo lo -usado por  Roig y vivo en  lengua valenciana- también lo liquidó la cientifica inmersión en pro de la unidad de la lengua.

Ayala aborda la homonimia de léxico peninsular: "Cadira, lo mismo que silla. Voz antigua en el castellano y así Juan de Mena dixo: En gran cadira  de ver, le dieron asentamiento. De donde quedó en la Iengua velenciana, que conserva muchisimos vocablos que lueron antiguamente nuestros de que hice recopilación en obrilla especial deste asunto" (f.142). La koiné lingüística medieval permitía a Juan de Ayala atribuir origen castellano a cadira (curiosa corrupción de cathedra) y de ser un Milá i Fontanals. hubiera reivindicado la unidad de las lenguas castellana y valenciana, pues infinidad de palabras (conquesta, finestra, nafrar, dues, flama, ome, farina, dona, altre, ferida, present, fusta, tot, ferro princep, aquest. fora, etc.) aparecen en documentos toledanos, sorianos y leoneses anteriores a 1238.

EI filólogo narra pormenores: "Çandia, voz arábiga que significa melón de agua. En Valencia hay observancia de que no se vendan hasta que entra el mes de octubre, alli les llaman melones de Argel" (f. 196).  Efectivamente, meló de Argel (sin apóstrofo) equivalía en idioma valenciano a la corrupción catalana sindria que ahora imponen como cultismo.  En el  manuscrito, Ayala  nos devuelve vocablos: "Cencerrada, aunque en su sonido es castellano, no lo es porque neció en eI Reyno de Valencia" (f. 153). Cuenta que entre los valencianos, "cuando una mujer se casa por tercera o cuarta vez, la gente acostumbra darles chasco Ia noche de boda, haciendo ruido por las calles con sartenes y cencerros, de donde tomó eI nombie de cencerrada".

Actualmente constituye un enigma el origen de cencerro, aunque documentos valencianos del XV muestran la variable con vocal abierta sancerro. Pero lo interesante es que el sonar cencerros (tintinnabulorum) a viudas casadas en  segundas o terceras nupcias fue costumbre en  los siglos III y IV, entre el Edicto de Milán y el hundimiento del Imperio. Quizá los mozárabes valencianos, o los valencianos que habian aceptado el islamismo, conservaron una jocosa tradición que no contravenía dogmas coránicos.
EI manuscrito también incluye nombres botánicos: "Albornios o madroños del latino arbutum, y en valenciano se Ilaman por el mismo origen alborsos" (f. 43). EI erudito Ayala derivaba la lengua valenciana del latin y árabe (no del catalán, claro); así, al enumerar viviendas como hacienda. heredad, granja. cortijo y cigarral, menciona la raíz arábiga de la alquería del  Reino de Valencia (f. 184). Lamentablemente, ahora es tal la manipulación (como denunció LAS PROVINCIAS), que hasta las alquerías que rodean Alicante, Orihuela y Valencia son llamadas masías por Ios inmersores.


                                             Las Provincias 20 de Mayo de 1997

EL MAL QUE NO VE D'ALMANSA TAMBE ALCANÇA...


 

Autor: Desconegut

 

Sempre han dit que es bo coneixer a l'enemic, perque aixina se pot lluitar millor contra ell. Igual parlar d'enemic referin-se als nostres APE's pot ser prou fort per a ells encara que si tenim en conter el significat de la paraula, extret de la RAE(atre dia parlarem d'esta sucursal catalanisadora), diu que un enemic va en contra, li desija i fa mal a l'atre ... '¡Che!, ¡clavat!, ni yo havera pogut donar una definicio millor, aixina que podim dir clarament que els catalanistes, els nostres APE's son enemics del poble valencià, no n'hi ha cap dubte.
En este trosset d'opinio anem a fer estudi d'un antic enemic del poble valencià. Primer davant de tot n'hi ha que dixar clar, que esta personeta ademes d'enemic del nostre poble, el valencià, tambe va ser enemic del seu, aixina que te doble delit, pero en fi, passem a parlar d'esta personeta. La veritat, primerament per pensar en benevolencia, esta persona va cometre un error, o va fer lo que pensava que era lo millor pel seu poble, encara que ell no preguntà i les següents accions el delataren, aixina que descartant la benevolencia, podim dir que lo que va fer era una injusticia o prenuda de pel, com se vullga dir, i aço al seu propi poble. Este biolec fa un grapat d'anys va fer una marranà que no va ser atra que crear el català a l' image i similitud del parlar tipic barceloni. ¿Sabem ya qui es? Be, suposem que sempre podim trobar algun despistat o simplement algu que no ho sapiga, perque ningu naix ensenyat, puix este senyor no es atre que el matarife Pompeu Fabra. Li done este calificatiu, perque ell sempre a volgut matar la llengua valenciana i encara que a personeta morta, terra damunt, el seus discipuls no tenem mes desfici que seguir els manaments que ell els va deixar escrits a foc: primer, una llengua, despres, una cultura i finalment una nacio. Aço ultim me fa comprendre perque la majoria dels nostres benvolguts APE's son ateus, i me pareix del tot llogic, ya que n'hi ha una llectura del nou testament que comentava que no se podien tindre dos senyors, o vols a un i desprecies al atre o al reves. En fi, se dixem de reflexions cristianes que als nostres APE's no lis interesa res ni miqueta i anem al tema.
Este senyor a demes de pendre el pel a la seua comunitat sancera, obligant-los a parlar com els barcelonins, despres comença la cavalcada de conquistar terres veïnes, aixina que va anar a per les Illes Balears i Valencia. En el cas que mos toca, sempre intentant possar ma a Valencia, fins que al final va obtiendre el seu frut mes preciat i que es mal de cap de tots els valencians, que son, com no, les Bases de Castelló o del 32. Es descarat l'intent de manipulacio catalanista, d'estes bases convertir-les a normes, i dic que es manipulacio descara perque son els propis "llingüistes", supots entesos en llengua, qui diuen en volta de bases, normes de Castelló, com si fora lo mateix. I ratifiquen actualment que estes bases, no normes, no s'equivoqueu chiquets de la AVLl(atra entitat catalanissadora que tambe tindre temps de parlar d'ella) varen ser firmades per l'unic filolec(vol dir que les atres firmes no valen res, ¿no?) present, Luïs Fullana, que al any següent va traure la seua proposta, molt d'acord no estaria ¿no?, desmontant lo que s'havia inicialment acordat en les bases de Castelló. Pero clar, esta coseta no la diuen els nanos de la AVLl, perque Fullana es la seua base, pero tambe el seu forat. Com que de les bases del 32 tambe parlaré en un futur, continuem en el tema, despres de no tindre prou el senyor Fabra que les bases de Castelló foren una copia casi exacta de les seues normes barcelonines, va advertir al seus contactes de Castelló que era un perill que denominaren a la seua llengua valenciana, que tenien que dir-li català. Per supost el seus amics en Castelló donaren per sentat que si canviaren la denominacio de la llengua, les bases no se firmarien...
Be, pot ser que el senyor Fabra tinguera un poquet de profeta, lo unic que tenia l'home, perque lo demes, puix aquell dia, no haveren tragat i hui, ell ya no ho pot vore, pero tampoc, i puc anunciar que mai. Mos podran enganyar, ensenyant-mos català a les escoles, a la tele, etc pero mai podran impedir que parlem i anomenem com toca a la nostra llengua: la llengua valenciana

EL LLIBRE DEL REPARTIMENT



AUTOR: DOMINGO GIMENO PEÑA



Els Furs, la Cronica del rei en Jaume, el Libre del Repartiment i els Llibres de aveïnament son instruments que contrastant-los en la documentacio coetanea, tant cristiana com musulmana, nos servis per- a coneixer la nostra historia.

El Libre del Repartiment de Valencia, que se conserve original en el Archiu de la Corona de Aragó. Es un protocol notarial, en tres volums, en el que s´anaven anotant els oferiment de cases i terres que Jaume I va fer a tots els "creuats" que van acudir a la conquesta de Valencia. Se va escomensar el dia 9 de juliol de 1237 i va continuar fins molt despres de la presa de la ciutat. Estos llibres escrits en paper, poden ser els eixemplars mes antics que tenim en Espanya de llibres en esta materia.

En el segle passat se va escomensar a publicar la Coleccio de documents inedits de la Corona de Aragó. En el volum 9 (Barcelona, 1856) se va incluir una edicio del Libre del Repartiment publicada fragmentariament per Prospero de Bofarull. Els erros i el desconsert originat per la edicio de Bofarull es molt, gran i variat, i tardarà molt de temps per a que la historiografia els arregle. Des de la data de entrada de Jaume I en Valencia fins la proporcio de repobladors asentats en la ciutat, com una distribucio inexacta de procedencies, son erros que han segut considerats pels sectors interesats com a fets irefutables i a pesar de que les investigacions posterior han demostrat la seua falsetat, continuen mantenint-se sense cap critica.

Tant les croniques cristianes com les musulmanes i la documentacio de la Cancilleria Real fixen la data de capitulacio de Valencia el dia 28 de setembre i per la vesprada al caure la nit van entrar en la ciutat.

En el Repartiment original una nota diu: "Die sabbati, VII idus octobris intravimus civitatem Valentie" no mes cal vore les notes cronologiques del Repartiment per a comprovar que cuan se parle del rei se fa sempre en tercera persona, mentres la noticia de la entrada se fa en primera persona, lo que nos indica que van ser els escrives del Repartiment els que van entrar el 9 d´octubre a Valencia i no el rei de forma triunfal com nos diu Bofarull.

En l´edicio original hi han linies en noms tachades i atres que no. L´edicio de Bofarull, elimina generalment les linies que estan tachades per unes ralles en els codecs i done les llectures que son facils. Al pareixer va pensar que en molts casos els tachons podrien ser errors dels autors del Libre del Repartiment.

En el reconte sobre l´edicio de Bofarull eixia que se van entregar 1018 cases a repobladors catalans i 597 a gent procedent d´Arago. Cuan se va comprovar que el cavaller aragones Artal de Luna, primer nom que consta en el Repartiment i que segons demostren els documents publicats per Huici-Cabanes, documentos, II nº 243, va rebre el titul de propietat: "Artallus de Luna alqueriam de Paterna et Manezar" no consta en l´edicio de Bofarull per estar tachada, aixina se va creure convenient fer una nova edicio.

L´any 1979, Cabanes-Ferrer van publicar una nova edicio del Libre del Repartiment i van arrivar a la seguent conclusio: el Repartiment era un protocol notarial en el que s´anotaven tots els oferiments que el rei fea als cavallers que li ajudaven en la conquesta de Valencia. cuan la donacio se fea efectiva s´estenia el titul de propietat (dels que se conserven molts) , al mateix temps se tachava el nom com a prova de que la donacio ja s´havia fet.

El contrast del Libre del Repartiment i els titul de propietat, demostren que el reconte de Bofarull nos indica els que van vindre per les bules oferides pel Papa Gregori IX i se van anar sense contrivuir a la repoblacio de Valencia, sent pues el seu reconte de donacions totalment erroneu.

Cabanes-Ferrer utilisant metodes profesionals i contrastant: Repartiment, Tituls de propietat, Llibres de aveïnament i croniques tant musulmanes com cristianes demostren que la poblacio valenciana va aumentar no mes un 5% en la repoblacio cristiana i de eixe percentage la aportacio catalana va ser minima, lo que nega totes les tesis catalanistes.
Al surgir la Renaixença valenciana, el seu gran impulsor Teodor Llorente fixant-se en el text de Bofarull el va utilisar en la seua colaboracio de La coleccio, España. Sus monumentos y artes. Su naturaleza e historia. Valencia (Barcelona 1887,tomo I, p.88). Molts valencians se van decantar al catalanisme influits del gran prestigi de Llorente.
En Valencia han faltat historiadors profesionals i han sobrat aficionats sense cap ofici ni rigor cientific, pero si a principi de segle els dubtes eren raonables per falta d´investigacio, hui enrocar-se per a defendre les tesis catalanistes com fan alguna institucio i alguns partits politics resulta patetic.



EL “LIBRE DEL CONSOLAT DE MAR” I EL PORT DE VALENCIA

Per
José Vicente Gómez Bayarri (Dr. en Historia)
El creiximent de l’activitat mercantil portuaria en la segona mitat del segle XIII va fer convenient la creacio de l’institucio del “Tribunal del Consolat de Mar”, per privilegi de Pere I el Gran, concedit a la ciutat de Valencia en 1283, avançant-se als que es constituiren dins de la Corona d’Arago, en Mallorca (1342), Barcelona (1347), Tortosa (1363) i Perpinyà (1387).

L´objectiu essencial fon deliberar i sentenciar els contractes i les diferencies que sorgien entre patrons d´embarcacions i mercaders, atenint-se als usos i costums consuetudinaris de la mar en eixa epoca. La dita Institucio Consular fon otorgada al comprovar l´importancia que anava adquirint el port de la ciutat de Valencia.

El Libre del Consolat de Mar té el seu orige, fonamentalment, en el "Constituum usus", text pisano del segle XII, i en un atre text llatí, "Consuetudo maris", de la primera mitat del segle XIII.

El "Consolat de Mar" es una recopilacio del dret consuetudinari maritim elaborat per jurisconsults a partir del segle XIII. El contingut originari del Libre del Consolat de Mar està constituit per disposicions entorn al procediment i dret mercantil i maritim. Es un codi de la llegislacio maritima - comercial, compendi de la multisecular acumulacio d´ordenacions, usos i practiques, arreplegades i sistematisades per "savis homens qui van per el mon" i per "nostres antecessors". Arribà a adquirir tanta autoritat que es va convertir, de fet, en el dret comu de les materies maritimo - comercials en tot el Mediterrani. Per esta rao, es feren tantes traduccions: a l´italia (1519), al castella (1539), al frances (1577), entre uns atres idiomes. Bastara recordar que segons opinio d´historiadors del Dret, el Libre del Consolat de Mar fon durant anys el llibre mes difos per tota Europa.

El manucrit que es conserva en l´Archiu Historic Municipal de la ciutat de Valencia fon confeccionat a les acaballes del segle XIV, en bella caligrafia de Jaume Gisbert i iluminat per Domingo Crespi, i constituix un monument juridic de primer orde i una joya lliteraria i artistica.

L´estructura laboral de l´activitat de Mar està perfectament configurada en el Libre del Consolat. Els carrecs mes significatius eren: el "senyor de la nau", amo i capita de l´embarcacio; el "nauxer", oficial tecnic que disposa la maniobra i ordena les funcions de la gent; el "mariner", encarregat de realisar activitats especifiques en la nau; el "escriva", administrador de l´embarcacio, etc.

La defensa contra la pirateria i el corso, la vigilancia de la costa, l´activitat pesquera i l´expansio maritima comercial desenrollà l´industria naval valenciana, alçant-se drassanes per a la construccio i restauracio de tota classe d´embarcacions. Ya el rei Conqueridor, Jaume I, utilisà la via maritima per a aprovisionar les seues hosts, i ell mateix fon l´impulsor d´obres en el "Grau". El port de Valencia va ser punt de confluencia de rutes i mercaders, i les seues drassanes s´encarregaren de construir i reparar naus.

En el fondo de la seccio del Mestre Racional de l´Archiu del Regne de Valencia consta consignats gastos efectuats per encarregats del control de les "drassanes del Grau". Estos fons documenten preus de productes, salaris professionals, ritme de treball, materials utilitsats en la construccio i reparacio d´embarcacions, llocs de procedencia de la fusta i d´atres materials, etc., testimoniant l´intensa activitat de l´industria naval en les drassanes i port de la ciutat de Valencia, cap i casal del Regne en els segles migevals.


EN LO CARCHE PARLEM VALENCIÀ



Autor: Ricardo García Moya

Aquella mujer -la que Inmersiomán incrustó como pre­sidenta en su academia-, expre­saba malestar: "en el extranjero se dan clases de lengua valencia­na, llamándola catalana". Mira, Ascensión, no abuses; calla y cobra. Todos saben que sois vo­sotros, tú la primera, en catalanizar hasta los jadeos orgásmicos: aixína que mut y bolchaca. A tu lado -no en Wisconsin-, tienes a los más espasmódicos catalaneros del orbe. Así, desde hace años, un tal Jordi Colomina desarrolla frenética actividad (bien pagada), desde la Univer­sidad de Alicante contra el idio­ma valenciano y a favor del cata­lán. Funcionario de la Generalitat Valenciana y académico tuyo, allí donde puede suelta lo del "catalá al País Valencià". En París dictó "Com i com en cata­lá" en el Col-loqui de la llengua catalana (París, 2000); y, tras visitar la murciana Serra del Carche, comenzó una obsesiva campaña reivindicando la catalanidad cultural de la zona: "El català a Murcia", "L'antroponimia murciana d´origen català", "La influencia del català sobre el castellà de Murcia" etc. Hasta los monjes de Montserrat rezan por Colomina y editan sus ado­quines; y Campspons, ¡ay!, pide a este ejemplar que decida el nom­bre de "la nostra lengua".

Pensat y fet. Huí me'n vaig al Carche: dents nets, cremallera pujá ¿eh?, depósit ple y huitanta quilómetros, me pareix, dasta el Fondó dels Flares y Barbarroja, ralla del Reyne. Los de la Ge­neralidad del PP han anormalizado hasta la última población, sustituyendo los "colege y polideportiu" por los catalanes "col-legi i poliesportíu", como manda el IEC.
¡Quin fret fa, foootre! Dos grados en la Cañada del Trigo y, tomando el sol, la murciana Llidia Samper de 78 años: "Mosatros parlem valencia desde sempre", me dice mientras eva­lúa si soy algún pervertido sexual o furta titos. El acento de Llidia es bello, ancestral, transmitido de padres a hijos sin interferen­cias del fascismo catalanero ins­titucional. Llidia es modesta: "Yo tinc pocs estudis. Vaig tindre un mestre que anava d'un poble a atre en bicicleta. Mon pare li donava uns dinés... y ara, a la vellea... "

Aquí, en el Carche, sólo se escucha el reposado verbo de Lli­dia. El placer de oír idioma va­lenciano es profiláctico contra infecciones del Canal 9 de Campspons, o las de mis colegas que imponen el catalán. Le pre­gunto por Matilde Amores: "L'atre día la soterraren a la po­breta". Saboreando la dicción, recuerda su nacimiento en Los Cápitos (sic), de la Serra del Carche. Ya adulta, "en uns poquets dinés m´en vaig fer en esta caseta... la del costat es de ma germana; en l´atra viu un fadrí. No vullgué dona...". Al fondo, una vivienda rural se ha transformado en coent chalet botifarrero, tipo Consuelito Ciscar. Con sonrisa escéptica, desengañada, la noble murciana cuenta: "...l´han comprat uns extrangers que no parlen en ningú de mosatros, y l'han cercat pera que no mos acostem. Poc a poc, estem quedanmos a sole­tes". No lo sabe bien Llidia. El castellano se acerca por el sur y, por el norte, el catalán que en­señan los maestros del Pinós y los funcionarios de Campspons. De momento, aunque rabien los Colomina y Ascensión, estos murcianos declaran orgullosos que hablan idioma valenciano.

Esta situación en Murcia, que escapa a la ocupación catalanera de los medios y organismos, pre­ocupa a los comisarios. De la Universitat d'Alacant del PP parten monjes-guerreros del catalanismo para redactar pan­fletos que catalanicen la zona. Así, el patatero ensayo de Ester Limorti sobre "El Carxe" -en puro catalán y donde afirma que allí sé habla catalán-, fue editado por la Diputación de Alicante de Julio de España, el despreciador de lo valenciano más caro de Europa (junto a Trillo Banderolas) y, además, degustador de Raimon. Como es para la Diputación del PP, Limorti usa catalán puro: "llogarret avui gairebé..., llogarret i pedania avui disolta, posseix un,,,; Beatriz nascuda a la...". Es lo que satisface a Julio de España, no el ruin idioma valenciano. Para estas catalanadas, el Juli y los Campspons siempre tienen la bolsa institucíonal abierta, sabiendo que los colaboracionistas de Información y Levante callan o aplauden el despilfarro. A los del Carche les engaña esta panda, pues escuchan la jerga catalana de Limorti o la de Canal 9 y creen que es el valenciano de Valencia: "Mosatros parlem el valencia de mosatros. No com el valenciá de Va­lencia, ni com el parla vosté" (Limorti: El Carxe, p.185) Yo soy testigo de que hablan un valen­ciano perfecto, con lógicas isoglo­sas dialectales; aunque la Limorti se asuste de la contrac­ción "moatros" (p,186), o de "un got bo de vi... la gachamiga blana o tortillera, que diuen, que pareix com si fora una tortilla" (p.187). La normalitzadora alte­ra topónimos a placer: "El Car­che" (del mozárabe "carrichar"), lo transforma en "El Carxe"; y "Les Cases dels Flares", en "Frares"; reconociendo que pro­nuncian "flares" (p.20).

Desde Barcelona -sin que la Ascensión diga mu-, ya han to­mado posesión: "en aquest s'ha congriat modernament un veïnat de llengua catalana amb el nom del Carxe" (Onomasticon. Bar­celona, 1995). Muy moderna­mente no será, fascistas raposos, pues Llidia tiene 78 años; y su vecino, 91; ambos nacidos de padres murcianos y valenciano-hablantes. Además, en tiempos de Sant Vicent parece que el idio­ma valenciano era usado o entendido desde Cartagena a Favanella (Murcia); incluso en 1696, en el Certamen poético celebrado en Mazarrón -cerca de El Palmar y junto al río Sango­nnera- hallamos valencianismos: alas del Rapenat (sic), pluvias, garrofet, el bon vin, gabias de Valencia, con din din del Micalet, baladre;, etc. Por suerte, el Colomina no puede suspender a Llidia por hablar este idioma valenciano: "yo vullc... hui mos sentén en la taula... un ingenier me va fer un retrato". Llidia usa el cultismo valenciano "retrato", del italiano "ritratto", presente en la prosa manierista: "per orde del senyor archebisbe, fia llevar un retrato" (Porcar: Díetari, any 1613).

Es tan dañina la factoría de Ascensión que debiera llamarse "Academia del Encangrenament"; usando una voz valencia­na que todavía no nos ha robado el IEC y, por tanto, no la autori­za su mascota AVL. Esta familia léxica (de voces comunes con el castellano; p.e., "cangrena"), po­seía matices semánticos y morfo­lógicos que la diferenciaban de "gangrena", por su parentesco con "cancre" o cáncer. Usual en la lengua valenciana, consta en los diccionarios; "cangrena, cangrenat, encangrenat, encangrenament" (Escrig: Dicc. 1851). "Encangrenat, encangrenarse" (Fullana: Voc. 1921); igual que el antiguo francés "cancrena" o el italiano "cangrena". Pese a que en castellano era frecuente: "cre­cer la cangrena" (Sigüenza, J. Hist Orden s. Jerónimo, 1606), y figuraba en el Diccionario de Au­toridades, no creó un derivado como el valenciano "encangrenar", arraigado incluso en la paremiología del Reino: "barber piados, encangrena la plaga" (Ros: Tratat. 1736) El refrán alu­día a la función quirúrgica del barbero, burdo extractor de muelas y peor cirujano de llagas o plagas. Ací, en lo Reyne, al bar­ber Campspons li agrá 1'endenyament catalá y no suprimix l´Academia del Encangrenament. Mentres, la cangrena ha aplegat al fútbol. ¡Vaja espectàcul el de les pancartes en catalá, no en valenciá, que s´exhibirén 1'atra nit en Mestalla! ¿ Tenim un Colomina com a president del Valencia? ¿Li paga molt Catalu­nya al Valencia C.F.?

EN LA FONDA DE MARIMENDRALES



Ricardo García Moya
Diario de Valencia 30 de Diciembre de 2001

Como hay mucho ateo em­boscado y el Carrascosa nos pervierte con anuncios de viudas ardorosas y credos a San Zaplana, no estará de más que estudiemos algún misterio de los que Timoneda escribía para ser represen­tados en la fiesta de Reyes. Uno de ellos fue el del “Cas­tell de Emaús” (sic), donde la magia narrativa de Timo­neda transforma la palestina villa de Emaús -según San Lucas- en la caótica posada manchega de la vieja Mari­mendrales, su marido Gonçá­les y el mozo Antón Bovo, trío cómico de habla castella­na. Estrenado ante el sevilla­no arzobispo de Valencia Joan de Ribera en 1569, no le pareció ofensivo al prelado que los papeles de “gracio­sos” se asignaran a la familia castellana de Marimendrales, mientras que los romeros Cleofás, Lluch y el mismo Je­suchrist dialogan en idioma valenciano.
Estas piezas renacentistas exportaban léxico al castella­no y catalán. Cuando se pu­blicó el misterio, medio globo terráqueo era explorado por heroicos catetos salidos de Puerto Urraco y alrededores. De Florida a Filipinas los cas­tellanos exploraban territo­rios sin saber que eran ex­ploradores, al no existir tal palabra y concepto en el idio­ma de Castilla hasta el 1600, cuando se documenta por vez primera. Cervantes no la qui­so usar en el Quijote, quizá por considerarla exclusiva de la dulce lengua valenciana que escuchó a su amigo Ti-moneda, el cual sí la utili­zaba: “célebres exploradors” (Emaús, v.4). No era el pri­mero, Fenollar y Roiç de Co­rella manejaron esta familia léxica en el XV anticipándose nuestro idioma al de los veci­nos. Aparte de crear neologis­mos, la lengua valenciana mantenía léxico mozárabe anterior al 1238. Así, el sus­tantivo “corder, cordero” (equivalente a los catalanes “anyell” y “xai”), era produc­to de la casa, según reconoce hasta el etimólogo catalán más resabiado: “el valenciá corder...es pot descartar que corder sigui manllevat del castellá... es, dons, una forma heretada del mossàrab” (DECLLC). Derivado del la­tín “cordus", era de uso ha­bitual en el Reino: “lo corder coneix la mare entre 500 en lo bel” (St.Vicent: Sermons, h. 1400). El dramaturgo Timoneda utilizó, como St.Vi­cent, las formas corder y cor­dero, sin rechazar el diminu­tivo: “un corderet” (v.257), recurso literario perseguido por los arcángeles de San Za­plana, que ordenan escribir “petit anyell” o “petit xai” a los blandos universitarios va­lencianos.
Semánticamente se iba cla­rificando el valor de verbos como “lliurar”, equivalente al castellano libertar: “gent ho­micida / quant sens orde, ni compas / han lliurat a Ba­rrabas” (Emaús y. 154). Signi­fica dejar en libertad, sin due­ño o poseedor; siendo contra­rio al catalán “lliurar” que equivale a entregar un pre­mio, un objeto o una persona. En el aspecto sintáctico, Timoneda construye acusativos con la preposición ‘a’ (lliurar a Barrabás), prohibido por la inmersión; e introduce cir­cunstanciales de lugar con la preposición “en” ante topó­nimos: “en Turquia” (Mist. Iglesia, a. 1575), respetando la sintaxis clásica de la canci­llería real: “lo maravellós que feu en Roma“ (ACA, reg. 2.239, f.83. Carta del rey Mar­tí als prohomens de Valencia, 9 novembre 1397). Timoneda no confundiría el valenciano “estic en Valencia” con el ca­talán “soc a Valéncia”. En otra estrofa, Marimendrales llama al locuaz esposo “cudo­lete” (v.145), castellanizando el valenciano “cudolet: perso­na que por su tono o mucho hablar nos molesta” (Escrig, 1887). También significa pie­dra pequeña como diminutivo de “cudol”; palabra de rai­gambre mozárabe (DECLLC) equivalente al castellano “co­dón” y catalán “còdol”, que es la corrupción que se enseña a los valencianos.
La inmersión prohíbe el neutro “lo”, despreciando que es recurso sintáctico usado desde los clásicos como equi­valente del nombre abstracto de la cualidad o para introdu­cir proposiciones sustantivas. Como Timoneda no tenía que ser presentador de Canal 9 o funcionario del gobierno de PP y CIU, lo aplicaba correc­tamente: “un pecadoret com yo, ques lo que pot fer plo­rant?” (y. 180), “lo que mal fet está” (v.162). La sintaxis catalana de la Generalidad retrotrae a una jerga que no diferencia entre “el que pot" y “lo que pot”. Los clásicos co­mo Valmanya construían: “fent lo contrari” (Carcer, a. 1495), y en la traducción al valenciano de Valerio Máxi­mo, Canals escribía: “en lo qual” (a. 1395), y en las Tro­bes leemos: “lo que vo­leu” (a.1474). El humanista Esteve, en el diccionario va­lenciano, recoge multitud de ejemplos: “lo que ell volia; yo faré lo millor; yo faré lo de­gut” (Liber. a. 1472). El uso del neutro “lo” sigue vivo. En las Hogueras del año 2000, en Alicante, una “Barraca" o co­misión festera con dos pares de melones entregó el premio “El millor de la Terreta” al periodista Vicente Hipólito de la SER, diferenciando el ga­lardón, sintáctica y semánticamente, del lema “Lo millor de la Terreta” que ostenta la propia Barraca. En el folleto que conservo puede leerse que la Barraca “Lo millor de la Terreta” otorga el premio a “El millor de la Terreta”.
Desde el condado nos ana­lizan como si fuéramos insec­tos. Timoneda escribía “ma­ravellós” (y. 205) igual que Martorell o el escribano del Llibre de Catí (a. 1328); es decir, diferenciando el adjeti­vo del catalán “meravellós”. Estas singularidades enlo­quecen a los filólogos del IEC Max Cahner (esposo modelo) y Gulsoy, que refunfuñan: “maravella es la pronuncia unánime entre valencians, tant que l’haver de grafiar-ho amb ‘e’ és un dels entrebancs amb que topa l’ensenyament de la llengua correcta en el País, de manera que hauria estat millor no introduir aquest entrebanc inneceasa­ri” (DECLLC). Esto lo escri­bían hacia 1985, cuando no sospechaban Cahner y Gul­soy que el femer de la Uni­versidad valenciana se deja “introducir" por donde uste­des saben no sólo el “merave­lla" de marras, sino el mismí­simo Boeing 767 de las To­rres Gemelas.

Ellos, desde Cataluña, man­dan en la academia de Ascen­sión y demás sucursales colo­niales. La inmersión, además, cuenta con el acusica diario catalán Levante, que arma la escandalera denunciando a cualquiera que use el idioma valenciano y no el catalán. Si un fallero escribe, por ejem­plo, “maravella” y no el cata­lán “meravella”, los colabora­cionistas lanzan apocalípticos alaridos “¡Guauu, guauu, fu­lanito escribe con faltas de ortografía, guauu, guauu! Mientras, el esposo cerrajero Max Cahner declara la uni­dad de la lengua, ocultando que ha sustituido léxico va­lenciano por el catalán, la morfología valenciana por la catalana y modificado las construcciones sintácticas y valores semánticos valencia­nos por los catalanes. Así son los dioses adorados en la aca­demia de Ascensión que, en cierto modo, semeja la ver­sión lingüística de la fonda de Marimendrales.