martes, 21 de octubre de 2014

EL TOCOMOTXO FILOLÓGICO

Por Ricardo García Moya

 Las Provincias 13 de Noviembre de 1994

   Sería injusto negar actividades positivas a ciertos personajes (p. e., Lerma, Pedraza, Gloria  Marcos...); de igual modo, el Santo Oficio también benefició a la sociedad en alguna ocasión. Así, en 1790 actuaba contra Francisco Lama, por imprimir un papel en que Ilamaba "borricos a los que hablan la lengua vascongada" (AH N, leg. 4464). Es evidente que los inquisidores ilustrados luchaban por ampliar las libertades reprimidas por el secular oscurantismo.
    En los juicios orales se oía al pueblo expresarse en su idioma nativo, dejando constancia de ello el escribano de turno. En un interrogatorio del 26 de abril de 1600, se describe el conjuro realizado en "un foguer", y la puntualización de que las palabras del mismo eran "en valenciano"  (AH N, leg. 528)
    La lengua valenciana era respetada por los tribunales de toda índole. Así se comprende lo sucedido el 6 de mayo de 1793, cuando el inquisidor fiscal de Valencia tramitó diligencia contra el "Llibre de les Dones" escrito en "Idioma valenciano" (sic), instando a que "se recoxan todos los exemplares". Pero la inquisición valenciana --sin inmersores socialistas- no estaba dispuesta a los excesos del fiscal y frenaron al torquemada filólogo. Transcurridos unos días, se reunieron en la Audiencia de Valencia los "señores inquisidores, el licenciado don Manuel Fuentes y el doctor don Matías Bertrán", acordando que: "Se dexe por ahora correr, tanto por su antigüedad y alta estimación  que goza entre los literatos, como para conservación del idioma valenciano"   (Archivo  Histórico  Nacional; Inq. Leg. 4504, f. 13)
    EI volumen -editado en Valencia en 1561-, contenía la "Disputa de viudes y doncelles, Lo procés de les olives y Lo somni de Joan Joan". La prudente tolerancia hacia estas obras se basaba   según los letrados   en la doctrina y "juicioso parecer de Fr. Andres de Valldigna. En nuestros días, han sido reeditadas por las fuerzas del eje (pujolsocialista), alterando ortografía y sintaxis conforme dicta el Institut de Estudis Catalans; con la valiente colaboración de los lingüistas valencianos que han dicho "sí, wana"; ya que quien se mueve no sale en la foto, no come caliente,  y,  encima,  es  regañado públicamente (como hizo Coromines con el sumiso Germá Colón en el DCEC).
   Nuestros clásicos son sometidos a la prueba del algodón, y si tiznan con CH inmundas procedentes del francés ¡qué asco!, o con indecentes Y, del griego, qué horror!; rápidamente son sustituidas por las TX vasco-catalanas y la límpida I latina. EI citado "Lo procés de les olives" del valenciano Fenollar -en edición a cargo de la catalana Gloria Casals del año 1984- , es actualizado "amb petites esmenes" consistentes en: "supresión de la h final; sustitución de la CH africada sorda por TX; uso del apóstrofo; uso del guioncito separando los pronombres enclíticos, según la ortografía moderna (catalana); sustitución de la Y por i; uso de las acentos según la ortografía moderna (catalana)", etc.
    Como ven, no son tan "petites" las modificaciones efectuadas por los inquisidores del Institut de Estudis Catalans. La mayoría obedecen -y hay textos que lo recuerdan- a diferenciarse del castellano. Lo triste es que  los valencianistas  han caído en la trampa del tocomotxo normalitzat, admitiendo a la condena de la Y griega o del léxico auténtico del idioma valenciano; aunque con los miles de millones que Lerma ha invertido en la catalanización  ¡qué difícil  es substraerse a ella! EI otro día, en el salmonete del régimen, insistían en que no debíamos usar deport, que era incorrecto;  ¡animalitos! ¿no recuerdan que la caza y la pesca eran un "deport" para los clásicos vaIencianos? (Por cierto, y sin ánimo de ofender ¿cuándo comenzarán los alcaldes del PP a sustituir lo de poliesportiu por polideportiu?)
    La táctica usada para amedrentar a los valencianos que todavía usan el léxico puro -y que, lógicamente, no tienen ni idea de semiología, lenguas parámetros o terapia lingüística- es hacerles creer que usan un idioma de bricolage corrupto. Una amiga catalanera -profesional, claro-, emplea un truco que aprendió de Guarner: cualquier palabra que no sea autorizada por el sanedrín barcelonés (mosatros, bellea, otonyo, dumenge...) la tilda de decadente o arcaísmo, y así no se salva ni una.
     Bernat  Fenollar, nacido en Valencia hacia 1440, escribía sobre "lo chic caragol" y su amigo Gasull también pecaba al usar el "yo" con Y griega y frases con "en lo niu, chiu, chiu"; o "gavinet, perea, pechina".   Aunque ya se sabe, el engaño persistirá  mientras la  inocencia  popular acepte casos tan sonados con el sucedido con el topónimo Muchamel, que jamás de los jamases  aparece escrito con TX, y de buenas a primeras vienen los del tocomotxo y les endosan que deben modificarlo por Mutxamel, que es valenciano culto. Y nadie se atreve a lanzar la más leve protesta. EI grado de sumisión es tal que, cualquier día, a alguna población les cambiaran su topónimo por el de fistro, y todos contentos.
     Ni la inquisición  habría tolerado  las manipulaciones actuales. La inefable editorial ECIR de Paterna, en su  libro de texto "Transit" de "catalá a el Pais Valencia" para alumnos de COU, tiene la caradura de afirmar que en la "Corona catalano-aragonesa (?) se culmina el proceso de catalanización con  obras como el Liber elegantiorum de Joan Esteve, del año 1489; que se trata de un repertorio de frases catalanas". Cuando el propio Joan Esteve aclaró que estaba escrito en "Latina et Valentina Lingua" Y qué van a decir, si el  propio Martí de Riquer manipula a su antojo la interpretación de los textos y lanza que "la valenciana prosa designaba el catalán".

    Aviso para terminar: compren una lancha neumática para las inundaciones que se avecinan, pues el nutrido colectivo de inmersores que viven del catalanismo en Valencia les caerá la baba a litros ¿motivo?- Corominas está a punto de terminar su "Onomasticon Cataloniae", donde devora lo que puede del "País Valenciano", como él llama a nuestro territorio; aunque respeta lo de Principado para el suyo. ¡Qué detalle tan científico ¿no?!

EL TEATRO VALENCIANO



GENERO SATIRICO Y HUMORISTICO DE LOS POETAS DE ZAPATILLA


Estamos en el tiempo del Renacimiento Valenciano en pleno siglo XIX, y dos son las corrientes literarias que conviven: los poetas de "guante" y los "de zapatilla". Los primeros estaban encabezados por Teodor Llorente y representaban a la burguesia, era conservadora y arcaica en su lenguaje para distinguirse del hablar del pueblo y por eso acudieron a palabras, giros y expresiones de los clásicos, muchas de ellas eran formas muertas, olvidadas y en desuso por pueblo (desde hacia 400 años), constituyeron el remate de un núcleo cerrado porque sus inquietudes no coincidieron con las del publico; incluso abandonaban el valenciano para tratar otros temas que fueran los propios del romanticismo. Todo lo contrario que ocurrió con los otros poetas de zapatilla, también conocidos como a populistas entre los que podemos destacar a Eduardo Escalante, José Bernat i Baldovi, Pasqual Pérez y Constantino Llombart; su propósito fue atraerse al publico a la causa del progresismo y por eso le hablaban en su lengua, el valenciano popular, cargado incluso de castellanismos (al igual que los poetas de guante), y así escribieron en los periódicos populares como El Mole, La Donsayna i El Cresol. Tanto los románticos  coincidirian en su valencianismo aunque visto de forma diferente como los satíricos 

EL SURREALISME PRESENT



Per Leopoldo Peñarroja Torrejón


Un dia de l´any 1997, en una conversa haguda en la Plaça del Carme d´esta
ciutat, una persona m´informava d´un sopar secret de tres persones, un
politic de la maxima responsabilitat de govern, dos representants (virtuals)
dels sectors que diem catalaniste i valencianiste, on la dita autoritat
posava sobre el tapet l´intencio de crear una nova entitat que assumira la
totalitat de les competencies normatives sobre el valencià. Casual o
involuntariament per tant vaig ser el primer en rebre la noticia, i encara
que el meu interlocutor no pareixia adonar-se´n del potencial explosiu que
l´ocurrencia contenia, en un moment va passar pel meu enteniment la pelicula
del panorama gens afalagador que se´ls aveïnava al valencià i al
valencianisme. Han passat set anys; la pelicula s´ha fet realitat, pero la
realitat la superat lo previsible.

Hi havia molta pressa. Als efectes d´una rapida fabricacio oficial, l´idea
fon remesa al Consell Valencià de Cultura, que, per expressa peticio de les
Corts Valencianes, devia emetre un dictamen (dictat pels dos grans partits
majoritaris) sobre el conflicte llingüistic valencià. Tot estava lligat.
Tant que un alt responsable del govern valencià me confessava que la decisio
ya estava presa, pero que era precis un pont, es dir, un organisme intermig
(el Consell Valencià de Cultura) encarregat de donar vida oficial a la nova
criatura normativa. Per tant, d´este pont, del CVC, que mai va debatre
(d´aixo done fe) sobre les causes del conflicte del valencià, i despres d´un
any d´escenografia i pressions, va naixer el dictamen de 13 de juliol del
98, la mare de tots els darrers mals del valencianisme.

Tots sabien i tots saben que alli es soterrava la capacitat normativa de la
RACV; que alli, ab meridiana claritat, s´acceptava l´unitat de la llengua
catalana; que alli se vorejava la normativisacio valenciana de l´ultim quart
de sigle, entesa com una simple contestacio localista; que alli se creava un
"ens normatiu" de dotacio politica, no cientifica; i que alli es reduïa al
no res la llengua valenciana historica, i inclus el seu nom, diluits en una
suposta llengua comuna (la catalana, clar) parlada en tots els territoris de
l´antiga Corona d´Arago. No hi ha taronger que done pomes; ni se cullen
llimes del llidoner. Per aixo me pregunte: ¿s´extranya hui algu de les
conseqüencies?.

Este dictamen dictat, sobre el qual vaig declarar el 13 de juliol del 98 que
ab ell el poble valencià perdria tota garantia futura de respecte i
preservacio de l´autentica llengua valenciana (i aixina ha segut), es per
tant la raïl de l´ultim big-bang del valencianisme cultural, trencat des
d´aquell mateix moment, de l´invencio de l´AVL i del moviment de voluntats
que, arant d´aixo, a disoldre la seua unitat, de cap a peus. Perque en el
98, el "valencianisme" va quedar doblement orfe: orfe de referents (una part
dels efectius de la RACV, presa en la tarallina de les pressions i mentires
del poder, s´entregaren a un colaboracionisme tan infantil com letal ab allo
mateix que l´havia reduita a la nulitat; i orfe d´informacio (la prensa,
unilateral, no ha deixat d´oferir una realitat virtual sobre les supostes
bondats de l´AVL), de forma que acabà partint-se en dos "valencianismes": a)
els qui, vista de dins la crua realitat, estimavem vital mantindre l´unitat
i la firmea de criteris, liderada per nostra RACV, i rebujar la participacio
en lo que era, i el temps ha confirmat, la disolucio de nostra llegitimitat
normativa, de la propia llengua; i b) els qui, aixina i tot, s´avingueren a
figurar, en condiciones anecdotiques, en l´invent de l´AVL, trencant-se
l´unitat del cor mateix de nostra maxima institucio normatisadora.

Es dir: el poder havia desactivat al valencianisme ab la colaboracio del
valencianisme. L´anulà dins l´AVL, on els "seus" efectius, numericament
irrisoris, carixen d´operativitat colectiva i especialisacio filologica,
pero ha venut la postal d´uns pocs noms airejats per la prensa com a
suposta, que no real, "representacio paritaria" d´un valencianisme
tradicional.

Hui, despres de tot, assistim a un panorama surrealiste. Politics de fora
disposts a furtar-li a Valencia historia, llengua i cultura (i territori,
temps al temps); politics de dins que ni defenen la segua llengua ni el nom
de la seua llengua; i politics tambe de dins que defenen el nom de la
llengua, pero no la llengua. Creuen que ya la defendrà la peculiar Academia
Valenciana de la Llengua, que inventaren perque volgueren, i que dotaren a
ciencia certa d´una majoria abrumadora de partidaris de l´unitarisme catala,
es dir, que posaren la llengua valenciana en mans dels qui volien la
catalana. ¿No ho sabien¿ ¿No volien saber-ho? ¿S´extranyen ara? ¿No han
llegit totes y cada una de les seues declaracions oficials, des de la
referent al nom del valencià a la que catalanisa de soca i arraïl el marc
curricular de l´ensenyança del valencià? Surrealiste.

L´Academia Valenciana de la Llengua es un parlament de partit unic o de
partit de majoria garantida i permanent que treballa no per a vitalisar la
llengua del seu poble, sino per a disoldre-la i imposar la del veï. Es, una
Academia impossible, perque no es possible que qui no creu en una cosa puga
dictaminar sobre ella; i unica, l´unica del planeta on els academics son
triats i proposats, previes pressions i maniobres, per dos partits politics
parlamentaris.

Alguns (yo crec que molts, a tenor de lo que he vist el 27 de novembre)
estem cansats. Cansats de ser simplement "singulars", perque la nostra
llengua, el valencià, es una llengua historica ab un cos fonic,
morfosintactic i lexic (i literari), no una cosa peculiar o una variant
exotica. Cansats de declaracions florals i de valencianisme light i de saló.
Voldriem conviccio i unitat; ciencia front a la falsetat i consciencia front
a les ambigüetats.

I com no hem perdut l´esperança, creem que la veu dels millers de bons
valencians que eixiren al carrer el dia 27 es atra volta el crit de la
nostra llengua, la valenciana


EL SUPREMO RECONOCE QUE LA «UNIDAD LINGUÍSTICA» DEL VALENCIANO Y EL CATALÁN TIENE BASE CIENTÍFICA



F. Velasco  

06/04/2006 La Razon  Digital

Madrid- Los debates sobre si valenciano y catalán son o no lenguas distintas han sido
abundantes y polémicos. Ahora, ha sido el propio Tribunal Supremo quien ha tenido
que entrar en esas conflictivas cuestiones. Los magistrados no entran a pronunciarse
de manera concluyente al respecto, al considerar que «no corresponde a los
tribunales» definirse al respecto, aunque sí se sostiene que la «doctrina científica» se
inclina por entender que ambas lenguas forman una «unidad lingüística» que no puede
dar lugar a discriminación.
Por este motivo, el Supremo a anulado una orden de la Consellería de Cultura,
Educación y Ciencia de la Generalitat Valenciana de 1995 que derogó una serie de
artículos por los que se suprimía la convalidación de los certificados de conocimiento
de valenciano por la Junta Calificadora de esta Comunidad con los certificados de
conocimiento del catalán de los organismos catalán y balear.
En la sentencia del Supremo, de la que ha sido ponente el magistrado Nicolás
Maurandi Guillén, se parte de que el problema de si catalán y valenciano son o no
lenguas diferentes «ha de aceptarse que no está resuelto» ni en el Estatuto de
Autonomía de la Comunidad valenciana, por lo que ha de prevalecer el criterio
sostenido por la doctrina científica.
Es, precisamente, en este punto, donde el Supremo concluye que los recurrentes -
Acció Cultural del País Valenciá y Sindicat de Treballadores y Treballadores de
L’Ensenyament del País Valenciá- han ofrecido «datos suficientes que revelan que es
unidad lingüística defendida tiene un importantísimo reconocimiento en el campo bre
En alza, en baja
científico y académico»; mientras que, por contra, la Generalitat valenciana «no ha
ofrecido datos, procedentes de ese mismo campo, que exterioricen la existencia de
corrientes doctrinales de similar magnitud que sostengan opiniones discrepantes de si
el valenciano y el catalán constituyen o no un mismo sistema lingüístico».
Cataluña, Baleares y Andorra. En este punto, el TS considera «especialmente
significativo» el dictamen de la Academia Valenciana de la Lengua, de febrero de 2005,
en el que se afirma que «le lengua propia e histórica de los valencianos, desde el punto
de vista de la filología, es también la que comparten las comunidades autónomas de
Cataluña y de las Islas Baleares y el Principado de Andorra» y que las diferentes
hablas de todos esos términos «constituyen una lengua, un mismo sistema lingüístico».
Sin embargo, también se especifica en ese dictamen que compartir una lengua «no
implica que los valencianos unas señas de identidad y unas características propias».
Pero, incluso, se destaca cómo la propia Generalitat valenciana reconoce que el
valenciano «es una variedad de la lengua catalana y en que es el dato de esa variedad
el que justifica la dualidad de certificaciones administrativas que preconiza».
Sin embargo, se afirma en la sentencia, la Generalitat no aportó razones suficientes
«de índole científico y académico» que justificaban la supresión de las convalidaciones
objetos de impugnación.
La conclusión del Tribunal Supremo es que con la orden impugnada vulneraba el
derecho a la igualdad, por lo que acuerda su anulación. La decisión ha sido adoptada
por unanimidad.


EL SISTEMA LINGÜÍSTICO GALLEGO-VALENCIANO



Hoy he tenido el gusto de descubrir el nombre del sistema lingüístico al
que pertenece el idioma Valenciano y, por asombroso que parezca, no es otro
que el "sistema lingüístico gallego-valenciano".

Si alguien me hubiera dicho hace unas pocas horas que el
"gallego-valenciano" es el nombre del "sistema lingüístico" del que forma
parte el idioma Valenciano no le habría dado crédito, pero resulta que es
algo que he podido comprobar por mí mismo y ahora ya no tengo la menor duda
de que ésto es así.
Yo, valenciano de nacimiento, escasamente ilustrado y poco dispuesto a salir
de mi terruño, nunca conocí a persona gallega, ni estudié su lengua, ni
visité su tierra, y sin embargo hace escasamente unas horas visité la página
web de la Xunta gallega y tuve el gusto de leer el discurso de bienvenida de
su presidente, el ilustre e ilustrado gallego D. Manuel Fraga, expresado en
genuina lengua GALLEGA (perdón, a partir de ahora lengua
"gallega-valenciana").( http://www.xunta.es/presiden/gsaludo.htm ).

Como les digo, cientos de kilometros separan mi terruño valenciano del
equivalente gallego, pocos estudios idiomáticos enaltecen mi parco (o
inexistente) curriculum lingüístico (menos aún los referidos a la lengua
"gallega-valenciana"), y sin embargo he sido capaz de entender con precisión
meridiana todo el discurso de D. Manuel, gallego sin fisuras, en una lengua
a la que hasta ayer consideraba distinta pero que hoy he de considerarla en
unidad con el Valenciano y por tanto una misma lengua.
Sin haber estudiado jamás el idioma gallego lo entiendo, por tanto he de
admitir la "unidad de la lengua" Gallega y Valenciana y llegar a la
conclusión de que son el mismo idioma: el "gallego-valenciano".

Cierto es que algunas palabras no son exactament iguales, pero si muy
parecidas o parecidísimas, e igualmente algunos usos sintácticos o verbales
también varían un poco, pero muy poco o poquísimo (al menos yo lo advierto
así y eso que no he estudiado nunca "gallego-valenciano").
Yo creo que lo anterior tiene fácil enmienda. Lo único que se tendría que
hacer es, por una parte juntar todo el léxico de las dos lenguas en un mismo
diccionario ("Gall-Val") ya que forman parte del mismo sistema lingüístico
"gallego-valenciano" y después, crear un estandar de lengua
"gallega-valenciana" donde se unifiquen las variedades dialectales
existentes a lo largo de los "Paises gallego-valencianos".

Alguien me ha comentado que lo que se conoce como la "Academia Valenciana de
la Lengua" (A.V.L.) anda en la faena de hacer algo parecido entre la lengua
"gallega-valenciana" y la catalana. Lo cual no es una mala noticia si
partimos de la base de que "cuantos más seamos más nos reiremos" o esa otra
de que "más fuerte será la lengua".
Por mí perfecto, pues como entiendo todas las lenguas (sin estudiarlas), no
seré yo quien le ponga pegas a un posible "sistema lingüístico
gallego-valenciano-catalán".

Jaume de la Serra

(P.D: ¡Ah!, y el astur-leonés también lo entiendo, así que habrá que ir
pensando en ampliar el asunto...).

EL SIGLO DE ORO DE LAS LETRAS VALENCIANAS


Autor: Ricardo García Moya
"Identidad y nombre propio de la Lengua Valenciana. Siglo de Oro Valenciano".


El sentimiento valenciano de poseer una lengua Valenciana, con nombre propio, distinta y diferente al resto de lenguas romances que existían fuera del Reino de Valencia, es algo que se manifiesta de forma precoz tras la reconquista, a sazón de los testimonios escritos de algunos de nuestros más ilustres (e ilustrados) valencianos que dan fe de ello.

El Reino de Valencia fué el primer reino de la península en desarrollar y tener (a partir del siglo XIV), un "Siglo de Oro" literario (en nuestro propio idioma Valenciano), adelantándose incluso al castellano. Su esplendor e influencia fué considerable sobre las otras lenguas peninsulares, y más aún, si cabe, lo sería sobre la lengua catalana, que con toda probabilidad adoptaría y asimilaría formas de la lengua valenciana que la harían parecerse cada vez más a nuestro Valenciano.

Desgraciadamente, desde hace ya tiempo venimos asistiendo a la apropiación indebida de nuestro "Siglo de Oro" Valenciano por parte de grupos pro-catalanistas que lo pretenden hacer suyo con la única finalidad de dar lustre y esplendor literario e histórico a una lengua catalana que no tuvo ninguna relevancia literaria en esas fechas, ni por mucho tiempo después.
Para sus burdos propósitos algunos han llegado al extremo de manipular las propias palabras de los autores Valencianos de nuestro "Siglo de Oro", que declaran en sus obras escribir en "Lengua Valenciana", suprimiendo la expresión "Lengua Valenciana" allí donde aparece, o sustituyéndola premeditada y malintencionadamente por "lengua catalana".

Por fortuna las obras hablan por si mismas y tras su consulta no es difícil dejar en evidencia a todos aquellos manipuladores que sustentan sus pretensiones en la mentira y el engaño (tal y como demuestra el magistral Ricardo García Moya en sus magníficos y documentados escritos de denuncia).

La mayor parte de referencias e imágenes que se presentan a continuación han sido obtenidas del magnífico libro "El Crit de la Llengua" de Josep Alminyana i Valles, disponible en formato .pdf en la web de "Lo Rat Penat" en el apartado "Biblioteca/llibres".
Testimonios históricos acerca del nombre e identidad de la Lengua Valenciana:
(Pinchar sobre los enlaces para ver fragmentos de los textos originales)

-Fra Antoni de Canals (1352-1419), dominico como San Vicente Ferrer, en el prólogo de su traducción del "Valeri Maxim" aclara que realiza una traducción de la obra a la lengua Valenciana, sabiendo que otros ya la han hecho a la lengua catalana. Testimonio indiscutible de que ya en aquellos tiempos el Valenciano y el catalán eran consideradas dos lenguas distintas:

"...perque yo, a manament del vostra senyoria, ell tret de lati, en NOSTRA VULGADA LENGA MATERNA VALENCIANA axi com he pogut, jatssessia que altres l'agen tret en LENGA CATHALANA...".

- Bonifaci Ferrer (1478) hermano de San Vicente Ferrer, escribía en la última hoja de la Biblia traducida al Valenciano e impresa en Valencia:

"...Acaba la biblia molt vera e catholica: treta de una biblia del noble mossen Berenguer Vives de Boil cavaller: la qual fon trelladada de aquella propria que fon arromançada en lo monestir de Portaceli de LENGUA latina en LA NOSTRA VALENCIANA per lo molt reverend micer Bonifaci Ferrer doctor en cascun dret e en facultat de sacra theologia: e don de tota Cartoxa: germa del benaventurat Sanct Vicent Ferrer del ordre de pricadors...".

- Luis de Fenollet (1481) en "Historia de Alexandre de Quinto Curcio", a pesar de que fué impresa en Barcelona, dice:

"La present elegantissima e molt ornada obra de la hystoria de Alexandre, per Quinto Curcio Ruffo hystorial fon de grec en lati, e per Petro candido de lati en tosca, e per Luis de Fenollet en la present LENGUA VALENCIANA transferida...".

- Miquel Perez (1482. 1494) en sus obras "La imitacio de Jesuchrist" y "Vida de la Sacratissima Verge Maria" dice:

"Libre primer de mestre Johan Gerson canceller de Paris de la imitacio de iesuchrist e del menyspreu de aquest mon esplanat de lati en VALENCIANA LENGUA per lo magnifich en Miquel Perez ciutada...".
"...que puix les vides de innumerables sanctes en vulgar prosa se troben escrites que la gloriosa vida de aquesta alta reyna de parays que es sancta sobre totes les sanctes no deu esser en la nostra VALENCIANA LENGUA callada...".
-          Joan Esteve (1488) en su obra "Liber Elegantiarum", diccionario Latin-Valenciano, dice:
-         
"Explicit liber elegantiarum Johannis Stephani, viri erudittissimi, civis Valentiani regie auctoritate notarii publici, latina et VALENTIANA LINGUA exactissima iligencia emmendatus...".

- Johanot Martorell (1490) en su obra "Tirant lo Blanch", impresa en Valencia, escribió:
-         
"...lo libre del valeros e strenu cavaller Tirant lo Blanch Princep e Cesar del Imperi grech de Contestinoble. Lo qual fon traduit de Angles en lengua portoguesa. E apres en VULGAR LENGUA VALENCIANA per lo magnifich e virtuos cavaller mossen Johanot Martorell...","...de portoguesa en VULGAR VALENCIANA per ço que LA NACIO DON YO SO NATURAL se puxa alegrar e molt aiudar per los tants e tan insignes actes coz hi son...".
-         
- Joan Roïç de Corella (1496) en su obra "Primer part del Cartoixa", impresa en Valencia y Barcelona, escribe:
-         
"Acaba la primera part del cartoxa en la vida de iesus deu hi senyor nostre: trelladada de lati en VALENCIANA LENGUA: per lo magnifich hi reverend mestre Joan Roiç de Corella cavaller hi mestre en sacra theologia...".
-         
- Francesch Eximenis (1507) teólogo catalán, en su obra "Scala Dei", escribe en Lengua Valenciana diferenciándola del Lemosin:
-         
"Libre intitulat Scala Dei ordenat per lo reverent mestre Francesch Eximenes, mestre en Sacra Theologia, del orde dels frares menors, novament traduit de lemosi en nostra LENGUA VULGAR VALENCIANA, util y molt profitos per a contemplar les coses divines".

- Fra Tomas de Vesach (1511) en su obra "La vida de la Seraphica sancta Catherina de Sena" dice
-         
"dita istoria...la he feta emprenptar en nostra LENGUA VALENCIANA. No curant, empero, de servar estil poetich ni modo artizat en lo arromançar si no planament e grossera, segons lo meu modo comu de parlar. E aço he fet tant per esquivar semblants modos, los quals per als religiosos no satisfan, quant encara per que moltes vegades en coses devotes y espirituals fan perdre la sentencia e la intelligencia de la istoria, especialment entre indoctes e ignorants...".
-         
- Joan Bonlabi (1521), catalán de Tarragona, en su traducción de "Blanquerna" (de Ramon Llull) a la Lengua Valenciana se disculpa por no ser experto en ella, ya que le resulta extranjera:
-          "...Hordenat per lo illuminat doctor y martyr mestre Ramon Lull. Traduit y corregit ara novament dels primers originals y estampat en LLENGUA VALENCIANA...".
-          "...segons me pregua me prengues yo lo carrech, coneixent-me affectat a la sciencia de aquell en
-          que noy sia docte, ni menys llimat en dita lengua, com sia a mi pegria [peregrina] y strangera...".

(Se puede observar (en el original también) el abundante uso de la "y griega" como conjunción copulativa y no de "i latina").
-         
- Rafael Martí de Viciana (1574) en la obra "Libro de alabansas de las LENGUAS Hebrea, Griega, Latina, Castellana y VALENCIANA", entre multitud de referencias a la lengua Valenciana, dice:
-           
-          "...LA LENGUA VALENCIANA ha provado con todo cumplimiento, que la lengua Latina es muy universal por todo el mundo, y de aquella muchas otras han tomado gran numero de vocablos, y que LA LENGUA VALENCIANA es hija, y factura de la lengua Latina por derecha linea y propagacion...".
-         
- Miguel de Cervantes (1547-1616), autor castellano dice en "La gran sultana" por boca de sus personajes:
-         
"...(Cadí): ¿Y cuáles son las que sabes? (Madrigal): La jerigonza de ciegos, la bergamasca de Italia, la gascona de la Galia y la antigua de los griegos; con letras como de estampa una materia le haré, adonde a entender le dé la famosa de la hampa; y si de aquéstas le pesa, porque son algo escabrosas, mostraréle las melosas VALENCIANA y portuguesa..."

- Lorenço Palmireno (1569), aragonés de Teruel, en su obra "Vocabulario del Humanista" equipara a la lengua Valenciana a otras de su entorno:

"...Y aunque eso no fuese, basta ver que, si no hallo vocablo con que arromançar una cosa en castellano, pongola en VALENCIANO, Italiano o Frances o LENGUA Portuguesa...".

EL SEÑOR DEL CATALANISMO

Por Ricardo García Moya

Las Provincias 2 de Marzo de 1995


El 17 de febrero, el pueblo contestó con desprecio a la derecha catalanera, pero queda una incógnita. Si los valencianos rechazan a los progres del Bloc de Progrés, ¿de dónde extraen apoyo logístico y económico? Las miradas, lógicamente, se dirigen hacia el felipismo parnasiano que rodea al president.
Lean, lean la revista "Serra d'Or" -fruto de la abadía de Montserrat- y verán qué especímenes nombra el president. Nada menos que el director de Política Lingüística de la Generalidad del PSOE, el mandarín Jesús Huguet, abanderó con un airado escrito "Des del País Valencià" la  defensa  del  catalán contra la Real Academia Española ("Serra d'Or", desembre 1994, p.11 ). No es excepción, los altos cargos que selecciona el virrey de Felipe González en Valencia tienen un denominador común: la aquiescencia con las fechorías expansionistas de Cataluña.
En la revista catalana "EI Temps" -mimada del PSOE de Pedraza, Vera, Joan Romero, etc.-, se anuncia "EI Savi", juego de preguntas y respuestas sobre "La Nació Catalana" que incluye, cómo no, a nuestro Reino de Valencia: En otra página del mismo ejemplar, la Generalidad de Lerma inserta anuncios con los que ayuda económicamente a estos cavernícolas que -de la forma más antidemocrática- roban nuestro territorio, literatura, pintura, gastronomía, etc. ¿Podría -si no se hernia algún político del PP o UV averiguar cuántos millones lleva tirados en "EI Temps", "Saó" y demás productos el señor L de la Generalidad?
La revista "Papers de la Costera" -apoyada por el régimen- propaga que, "en el siglo XV los valencianos se sentían plenamente identificados con la Nación Catalana". ¿Cómo pueden engañar tan burdamente al lector? En el XV los valencianos sentían verdadero desprecio hacia los extranjeros catalanes, como testificó el capellán del Magnánimo.  Incluso tuvimos guerra contra ellos en 1462.
Otro beneficiado del felipismo -que a menudo viene de Barcelona para  cargar  el  saco- es  Raimon (cantautor paradójico: de Xàtiva y catalán, millonario y proletario, paladín progre y trovador ensalzado por el búnquer cultural) que declara: "No existe contratación privada. Me contratan ayuntamientos, diputaciones, consejerías." Estos nuevos ricos del pelotazo cultural no dejarán que el chollo del poder cambie de manos.
Hasta mayo del 95 arreciarán en la agit-prop cultural, situarán cuatribarradas en los partidos televisados del Hércules y Castellón; ordenarán a los alumnos que escriban cartas en catalán a la prensa, fingiendo que defienden el valenciano; se Ilamarán "tots al carrer" para amedrentar al pueblo, etc. Son profesionales de la censura, ¿recuerdan cómo hicieron callar a Fernando Arrabal en Canal 9? ¿Por qué no remite el colaboracionista Fabregat sus censuras a "Imágenes prohibidas" de la TV2?
La  catalanización  no  repara  en gastos (total, pagamos usted y yo). En enero visité la exposición "Paz y guerra en la época del Tratado de Tordesillas", en Burgos. La muestra contaba con aportación de instituciones valencianas: platos de Manises del XV, copia de la prensa de Gutenberg del Museo del Puig, etc. Como no podía ser menos, la Universidad de Valencia, para demostrar que "el saber científico y literario se expresaba en las lenguas castellana y catalana" -según los paneles remitió el "Tirant lo Blanch" de 1490. ¿Resultado? Los castellanos salían con una idea clara: Martorell escribió en catalán y nuestros antepasados eran catalanes. Poco importa que Martorell puntualizara que usaba la Iengua valenciana.
EI señor L sonríe ante el saqueo. Albert Manent afirmaba el otro día en Barcelona que "La primera traducción de la Biblia al catalán se publicó en Valencia en el año 1478". EI mismo  Manent descubre que "habría que esperar hasta el siglo XX para que la lengua catalana volviese a tener otra traducción completa del libro fundamental de la cultura cristiana". Lo que oculta es que el original dice que fue traducido "de la lengua latina en la nostra valenciana". ¿Por qué quieren  robar esta obra? Porque .es única, y con su edición en Valencia el año 1478, precedía a la castellana (1568), francesa (1530) e inglesa (1535).
EI engaño que la Generalidad de Lerma ha practicado lo confirma diariamente la inmersión catalana en EGB y BUP. La Generalidad ha editado libros sobre "Actituds i normes d'us lingüístic" con estas intenciones: "Después de diez años de enseñanza del catalán, sota el rétol de valencià, como asignatura obligatoria en el País Valenciano, los autores han decidido atacar una cuestión compleja y que se había tendido a rechazar,  ya  que  era  asimilada  a adoctrinamiento  ideológico"   (en Escola Catalana sobre el libro de Rosa Sanz i Frances Ruiz: "Actituds i normes". Generalidad Valenciana, 1993). Es decir, esto explica Ia aprobación de libros "para convencer".
La Generalidad de Lerma -en su locura catalanista- se limita a copiar lo que hacen en Cataluña, desde la Escola d' Estiu ( Barcelona, 1931) hasta la inmersión ideológica. Los millones del contribuyente no le cuestan nada al señor L del catalanismo. Sacos enteros de folletos, exposiciones tendenciosas,  libros, vídeos, discos,  películas, recitales. La Generalidad dejará que se hunda Ferrys y se queme el monte, pero nos hará catalanes.

Ahora me acaba de Ilegar un foIleto, en papel carísimo, pagado por Lerma (bueno, por ustedes) con actos para beatificar culturalmente a Enric Valor (vaya ídem que tiene el noi) con ponencias sobre "Aportacions de valor a la lexicografía catalana" (25 marzo, 95). Estas jornadas acabarán en aquelarres catalaneros organizados por el Bloc del Regrés (perdón, del Progrés), subvencionados por Ios camaradas de L, con dinero de todos los valencianos.

EL SENTIDO CRONOLÓGICO DE LOS REYES

JOAN IGNACI CULLA/

LAS PROVI CIAS

13 de març de 2006N


Hablábamos estos días de la exposición que se celebra en el Museo del Carmen de la ciudad de Valencia, sobre la Corona de Aragón. Los visitantes que la hayan contemplado habrán observado el orden cronológico de los reyes que a lo largo de los años conformaron la dinastía de Aragón.

La unión real de Fernando de Aragón e Isabel de Castilla propició el nacimiento de lo que conocemos como España . En ese nuevo ente que nacía, el Reino de Valencia tuvo un papel esencial en cuanto a lealtad, aunque luego esta no fuese recíproca. De hecho, el rey Fernando solicitó una cantidad importantísima de capital al Consell de Valencia previa obtención, como garantía (primos pero no tontos), del empeño de joyas de la reina. Como los problemas económicos de esa corte no tenían fin, una vez más y pese a que la leyenda castellana nos hizo casi dudar (lo del poder mediático centralista en poco ha cambiado a lo largo de la historia) de que la reina Isabel empeñó sus alhajas para sufragar el proyecto de la búsqueda de nuevos mundos (la verdad es que se recurrió, a través del rey, a un prestigioso banquero valenciano, Luis de Santángel, para facilitarle el dinero que necesitaba). Poco tiempo después, la Inquisición le agradeció ese gesto a nuestro paisano asesinando a toda su familia judía conversa.

Empezaba la nueva realidad. Y desde luego, una realidad que no pasaba por los territorios de la Corona de Aragón y sí por los de Castilla. Como demostración de lo anterior, los reyes que sucedieron a Isabel y Fernando hicieron tabla rasa con todos los soberanos de los reinos peninsulares, y sólo los monarcas castellanos se consideraron sucesores cronológicos de los reyes de España. ¿No hubiese sido más justo, puesto que se inauguraba uno nuevo, puestos a cambiar, prescindir del orden cronológico no sólo de los reyes de Aragón, sino también de los de Castilla?


Si hubiese sido así, y sin contar el actual rey Juan Carlos, ya que no se ha dado otro monarca con igual nombre, su abuelo no sería Alfonso XIII, sino Alfonso II. Pero, ¿y si nace un Jaime? ¿Serán capaces de ponerle I, con lo que anularía a nuestro prestigioso Jaime I, por ser de la Corona de Aragón?

L "SECESIONISMO" LINGÜISTICO DEBILITA EL IMPERIO CATALANO-CATALAN

E

AUTOR: JAUME DE LA SERRA

 (Nomes versio en Castellà · Solo versión en Castellano)


 Dicen que eso que (falsamente) algunos nombran como "secesionismo" lingüistico "debilita al idioma". Y yo pregunto ¿ a qué idioma se refieren ?¿ al Catalán ramplón y amigo de lo ajeno ?

 Para empezar, lo que nunca ha ido unido no es necesario separarlo, porque ya lo está.
 En segundo lugar las cosas deberían llamarse por su verdadero nombre: "Absorcionismo" y no "secesionismo".

 Absorcionismo del idioma catalán hacia el idioma Valenciano por cuestiones meramente políticas y económicas. Esas son las razones fundamentales y primarias. Por tanto, olvidémonos de esos cantos de sirena lingüísticos y filológicos que lo único que pretenden es desorientar al personal basándose en el "cientifismo" partidista de cierta "progresia" rasputiniana subvencionada.
 Matizar también, que el auto-otorgado derecho a "trinque" del pancatalanismo obedece igualmente a asuntos de lustre histórico-literario imperial que "aconsejan" que la literatura Valenciana de genuinos autores valencianos del Siglo de Oro (de "mosatros") sea absorbida y considerada como catalana por el "stablishment" político-cultural catalán, que busca desesperadamente paliar el enorme, triste y chirriante vacio literario "clásico" del fatuo, engreido, ficticio y mal nacido imperio catalano-catalán (hoy bautizado como "Eurorregión" y ayer "Països catalans").

 El que el idioma Valenciano pueda continuar "secesionado", yendo por su lado, tal y como ha sucedido a lo largo de los siglos y el idioma Catalán haga lo propio, no puede debilitar ni perjudicar en absoluto ni a un idioma ni a otro. Antes al contrario, cada uno continuará en su distinta y propia evolución natural, que ya los viene diferenciando desde hace muchas centurias (tal y como lo atestiguan los propios autores clásicos valencianos desde el siglo XIV), y cada pueblo, el valenciano y el catalán (pariente el último, dicen, del pueblo Valenciano, pero cada día más lejano e insoportable), hará uso y decidirá en libertad sobre su propio idioma, lo hablará como le apetezca (que con toda probabilidad será "bien") y se encargará de transmitirlo a las generaciones siguientes siempre y cuando, en Valencia reino, la Academia Valenciana de la Lengua (A.V.L.) y toda la cohorte de iluminados catalanistas de sueldos millonarios que la pueblan, no destruyan, a base de catalanadas normativas y travestismos nominativos, como el de "catalanovalenciano", la baja autoestima de los Valencianos hacia su lengua propia Valenciana y los aboquen al monolingüismo castellano que no les genera problemas de esquizofrenia lingüística "culta-vulgar".


 Los pan/catalanistas deberían hablar claro, pero eso es algo que nunca harán porque saben que su discurso no interesa en absoluto a la sociedad Valenciana y porque de hacerlo quedarían al descubierto sus aviesas intenciones separatistas y disgregadoras de España previo "choriceo" del antiguo Reino de Valencia, su gente, su idioma y su patrimonio, para deleite y engorde de esa Cataluña que sueñan grande e imperial a imagen de la que fué forjada por la Corona Castellana.
 Y es que los catalanes, secretamente, envidian y admiran mezquinamente a su odiada Castilla, a lo que ellos llaman "España" (renegando de una "Hispania" de la que ellos siempre han sido parte por voluntad propia) y en la nocturnidad y en la alevosia polucionan sus más bajos instintos imaginando un colosal imperio catalán, con literatura medieval Valenciana incluida, que les permita codearse con sus "enemigos" los españoles en todas las enciclopedias y universidades del mundo (mundial).


 Por favor, estimado/a lector/a, cuando vuelva a oir aquello de que "el 'secesionismo' debilita la lengua", cambienle el "chip" a la frase y sustituyala por: "el (supuesto) 'secesionismo' debilita el PROYECTO IMPERIAL CATALÁN".
Y para los que no acaben de entender el por qué de dicho cambio, solo cabría recordarles cual es la consigna máxima del nacionalismo imperialista y colonialista catalán: "UNA LENGUA (catalana), UNA NACIÓN (catalana)".

 Asi pues, sabiendo ésto, no podemos extrañarnos (aunque sí indignarnos y defendernos) de la obsesión enfermiza y recalcitrante de gobiernos e instituciones catalanas para que se reconozca y acepte que el diferenciado e independiente Idioma Valenciano es el mismo que el Catalán. Ellos saben, los pan/catalanistas, que cuando se admitan sus delirios de que los Valencianos "hablamos Catalán", el Reino de Valencia estará más cerca de pasar a formar parte de la "Cataluña grande" bajo el sugestivo nombre que nos impusieron hace años de "Cataluña sur".


 Bueno, eso es lo que los "pancas" quieren, ahora falta que el pueblo Valenciano se deje (que va a ser que no).

EL SARANDERO, EL ESTARIBEL Y LA CORPENTA

Por Ricardo García Moya

Las Provincias 2 de Mayo de 1999


Cuando los valencianos eran libres lingüísticamente, el pueblo enriquecía con neologismos el idioma propio. En 1767, por ejemplo, las fiestas del "Centenar de la Verge dels Desamparats" inspiraron un romance publicado por Salvador Fauli, dedicado a "tota senyoreta que vullga anar tova en son sarandero". En él observamos la voz valenciana sarandero, equivalente al miriñaque o guardainfante castellano, formado por aros de madera o alambres que soportaban el tejido de la falda. EI artilugio provocaba un coqueto balanceo que generó este neologismo metafórico derivado de saranda: aro de madera bastante ancho con tejido en el fondo. Pendiente del techo y balanceándose ante cualquier roce o corriente de aire, servía para guardar el pan fuera del alcance de los roedores en alquerías y barracas.
Dos étimos disputan la paternidad del vocablo: el persa sirand (columpio), y el vasco sarán (cesto de madera de castaño). Curiosamente, el coloquio acaba con la frase: "de tots em despedixc" y la interjección abur. Se trata, parece, de la primera documentación de este neologismo derivado del agur vasco. Es decir, que surge en lengua valenciana antes que en la gallega y catalana, siendo coetánea de la castellana (el comediógrafo madrileño Ramón de la Cruz la utiliza hacia el 1770). EI coloquio contiene otro neologismo en la frase "anar en cabriolet", anticipándose el valenciano en el uso de esta voz respecto a las neolatinas hispánicas y, casi, a la francesa de origen (en Francia se documenta en 1759).
Entre las neolatinas es frecuente hallar vocablos homógrafos y de significado distinto; por ejemplo: las italianas noia, palla y caldo significan aburrimiento, pelota y calor. Algo similar sucede con el neologismo valenciano futre, presente en coloquios burlescos del XVIII: "lo molt futre estafador" (B.N. Primitiu, Ms. 419). Algún filólogo inmersor de la Universidad de Valencia lo traduce como "lechuguino, o persona vestida con atildamiento" (Marti, J.: "Literatura de canya", 218), al considerarlo galicismo. En realidad se limita a repetir la opinión de Corominas, siempre escorado a ver influencias ajenas a la península.
EI valenciano futre era un portuguesismo despectivo, equivalente a hombre engañoso y ladrón en los tratos. En el manuscrito donde aparece "lo molt futre estafador" (verso 105) se califica al mismo personaje como "lo Iladre embustero" (verso 98). Ambos vocablos poseían idéntico valor semántico, sin relación con los caballeretes "lechuguinos" que sugieren los del Institut d'Estudis Catalans. La procedencia de este portuguesismo es fácil de rastrear, ya que en el mismo siglo XVIII, millares de soldados portugueses recorrieron el Reino de Valencia durante la Guerra de Sucesión, y uno de los insultos más habituales que proferían era el citado. Así, en el "Resumen de los excesos cometidos por las tropas del Archiduque en los años 1706 y 1707", leemos que las tropas portuguesas del conde Guido Staremberg "llevaron (al prisionero) con bayoneta calada, diciendo: ¡Futre, futre! (...) Le Ilevaron en cuerpo, dándole de palos todo el tiempo" (f. 4).
Hay neologismos que, aunque inusuales, también fueron disputados agriamente por los etimólogos (salvo los valencianos) para sus idiomas propios. Es el caso de estaribel o cárcel, voz relacionada con el caló y el argot de los marginados que se documenta en castellano desde 1896. Ya en el siglo XX, en 1910, el escritor Vallmitjana dice que la localiza en ambientes carcelarios de Barcelona.
No obstante, Escalante se anticipa en dos décadas al incluirla en su comedia "Matasiete". En un diálogo entre valencianos de la clase media, un "sabater" dice: "tancarme en I'estaribel". La obra fue estrenada en el teatro Colón de Valencia el 31 de marzo de 1884.
La inmersión también empobrece el valor semántico de los vocablos valencianos, dándoles sólo el permitido por el Institut d'Estudis Catalans. Por ejemplo, en los diccionarios catalanes camuflados como valencianos, la voz "corpenta" sólo equivale a esqueleto y osamenta. Pero en el de Escrig de 1887 se añadía la acepción: "Tindrer u corpenta. Tener uno valor, bríos, decisión, disposición o ánimo para una cosa". Como es sabido, Escrig fue acusado por Corominas de falsario y de "incluir acepciones inexistentes" (DCECH, 1987), "pero la descalificación es una treta más de los lingüistas del Condado.

Escrig y Llombart se limitaron a recoger una voz viva del idioma valenciano, y hay pruebas. En Castellón, en 1875, publicaba Colom y Sales la comedia "Lo que fa la roba", con una protagonista femenina de mucho genio y atrevimiento, de la que un tímido enamorado comenta: "ella te masa corpenta" (p. 8). En la misma obra leemos: "la chamba fa desconeixer". Según Corominas, la primera documentación de "chamba" en castellano es en 1884, pero en el idioma valenciano de Castellón la encontramos en 1875. Evidentemente, hasta la llegada de los "salvadores" catalaneros, nuestro idioma gozaba de muy buena salud.

EL ROMANCE EN LA ESPAÑA MUSULMANA

Por: Ricardo de la Cierva

Los problemas -enturbiados por la pasión política- empiezan con la conquista musulmana de España al comenzar el siglo VIII, porque fuera de la inyección de algunos germanismos, la influencia visigótica en la formación c, las lenguas romances peninsulares es secundaria, especial­mente en el territorio de Valencia, y en todo caso esa in­fluencia no se puede comparar con el sustrato anterior, ni se puede considerar como una nueva capa del sustrato sino a lo sumo como una inoculación marginal. En buena parte porque los propios visigodos estaban ya romanizados en bruto cuando unificaron desde el reino de Toledo la Península Ibérica.

La invasión musulmana anegó a casi toda la Península. Solo se libró de ella, tras algunas incursiones iniciales y efímeras, la franja cantábrica (no así los Pirineos Orientales que fueron sometidos), cuya romanización tampoco ha­la sido muy intensa. Desde los primitivos núcleos cristia­nos del Norte (que en un segundo momento brotaron      también al sur del Pirineo, desde los valles altos y apoyán­dose en la nueva Europa imperial en gestación) los peque­ños ejércitos cristianos iniciaron la Reconquista, con el designio, cada vez más expreso, de recuperar la Península entera. Los reconquistadores descendían hacia los gran­    valles fluviales -el Duero, el Ebro-, hablando su balbuciente lengua romance, pero al liberar a las poblaciones cristianas sometidas hasta entonces al yugo musulmán no necesitaban de intérprete para entenderse con ellas; por los cristianos que habitaban esos territorios hasta enton­ces sometidos hablaban también una lengua semejante, romance mozárabe, cada vez más plagado de influencias árabes a medida que avanzaba el tiempo de someti­miento al invasor oriental y africano. Conviene dejar en claro desde ahora -en ello insiste el profesor Ubieto- que el término mozárabe no indica una lengua sino sobre todo una religión; la religión cristiana conservada entre los musul­manes. Esos mozárabes, esos cristianos, hablaban, desde luego, el romance derivado del bajo latín y seguían hablándolo cuando, por la presión de las conveniencias y las circunstancias, abrazaban el Islam. El núcleo conquista­dor árabe y beréber era mínimo e incluso a él llegó la ne­cesidad del romance. El conjunto de la población se iba tamizando en cuanto a religión y se iba arabizando en cuanto a cultura, sobre todo cultura de las capas superio­res. pero la inmensa mayoría de esa población, tanto los cristianos residuales como los nuevos musulmanes (y no pocos de los antiguos), seguían hablando romance, y así conservaron hasta que llegaron los ejércitos cristianos. ; investigaciones del genial filólogo Julián Ribera refe­ridas por ejemplo en la espléndida Historia de la literatura española del profesor Valbuena Prat, tomo I, Barcelona­       Gustavo Gili, 1974- no dejan lugar a dudas. Nadie admite hoy la tesis exclusivista de la escuela castellana, que pretendía identificar el nacimiento del romance en cada región reconquistada con la irrupción de los cristianos del Norte. Incluso la presencia, cada vez mejor valorada, de expresiones romances en los maravillosos poemas de la España musulmana durante el esplendor y la decadencia capital son una prueba en la que algunos han querido ver el fundamento de una tesis contraria; el romance nace ver­daderamente como lengua de masas en la España musul­mana. Hoy todo parece indicar que la tesis de la confluen­cia es la que goza de mayor probabilidad. E1 reciente descubrimiento de las jarchas o estribillos en la poesía po­pular árabe de Al-Andalus, con intensas inclusiones roman­ces que llegan hasta el final de la Reconquista, es una prue­ba sorprendente de esa tesis.

LA LENGUA ROMANCE EN VALENCIA
La pervivencia del romance en el Reino de Valencia n„ es, por tanto, ninguna excepción. También allí los invasores respetaron -por necesidad- la evolución del roman­ce (al-romía) al que sin embargo infiltraron intensamente -como en el resto de la España dominada- hasta un ter­cio de palabras. En Valencia floreció la cultura árabe -caso del famoso poeta Al-Russafi- que, sin embargo, está: influida por el romance valenciano. Las investigaciones da -arqueólogo Gironés muestran la pervivencia del romance en la región que estudiamos. Se han detectado numerosas ­huellas del romance en la literatura árabe del Reino de Valencia. En 1106, el aragonés Ibn Buklarix escribió u­n diccionario de plantas medicinales con doscientos nombre, mozárabes, entre los que distingue los vocablos provenientes de la aljamia valenciana. En 1180 san Bernardo de Alcira hablaba en romance valenciano al conde de Barcelona Ramón Berenguer IV. Los propios árabes diferenciaban a romance valenciano del interior (lengua valenciana churra que evolucionó luego al contacto con el castellano y se confundió con él; y el romance valenciano de la costa, del que proviene el valenciano actual. Entre las innumerables huellas dejadas en el valenciano naciente por el idioma de I,         invasores destaquemos los abundantes topónimos en Be-. (Benidorm, Benitachell), otros como Guadalest y Alboraya y palabras como alquería y acequia, que se transmitían también, entre otras muchísimas, al romance castellano


En un estudio documentadísimo e imprescindible, Aportaciones bibliografiques en torn a la identitat de la Ilengua  valenciana, Jesús Giner i Ferrer (Gandía, GAV, 1979) aduce las pruebas del padre Fullana sobre la pervivencia del romance valenciano hasta el final de la Reconquista, ilus­tradas por una reliquia realmente singular: la iglesia de San Vicente de la Roqueta, rodeada por un nucleo de población cristiana hasta que el rey don Jaime I hizo donación de ella en 1232, incluso antes de iniciar la conquista de la ciudad. Algo semejante sucedió con la iglesia de San Félix de Xativa; pero, como deciamos, lo verdaderamente importante a efectos culturales, no es la persistencia -verdaderamente emocionante- de la religión, sino la conservación del romance en medio del dominio islámico. ­Y ello está fuera de toda duda.

EL ROMANÇ

Autor: Joan  Ignaci Culla

Publicat en LAS PROVINCIAS, 06/02/06
Al llarc del temps, vegent com s’usa la qüestio llingüistica per a conseguir resultats politics. Distorsionar la realitat es el millor resultat per a conseguir “ciencia”, quan no deixa de ser una maniobra immoral. Molts son els que en publicacions i declaracions interessades pretenen demostrar la catalanitat del nostre poble, afirmant que les poblacions moçaraps no representaven, “ni tan siquiera una minoria influyente”, en els moments de la reconquesta, aixina com que es llingüisticament “incongruent”, l’evolucio del romanç en valencià. Es dir, que molts llegint estes “tesis”, pensarien que, o aci no hi havia ningu hasda l’arribada dels catalans, o eren muts.
Els que no estan somessos per “l’immersio”, demostren tot lo contrari: l’existencia del romanç en temps araps, com a precursor del valencià, i l’existencia d’un billingüisme reciproc, donada la bona “convivencia”, com ho testifica Hussein Mones, catedratic d’Estudis Hispanics d’Al Andalus en l’Universitat d’El Cairo, diu en el seu llibre Andalucía, Algarbia and Al Sharky , que quan va aplegar Jaume I a Valencia, hi havia en el Regne de Valencia 120.000 musulmans, 65.000 cristians i 2.000 judeus. Diu que el rei Zayan li va dir al rei En Jaume, al donar-li les claus de la ciutat: “En la ciutat de Valencia conviuen musulmans, gent noble del meu poble, junt a cristians i judeus. Espere que sapia governar-los per a que continuen vivint en la mateixa armonia i per a que treballen esta noble terra conjuntament. Aci, durant el meu reinat, eixien provessons de Semana Santa i els cristians professaven la seua religio en tota llibertat, donat que el nostre Coran reconeix a Crist i a la Verge. Espere que voste concedixca el mateix tracte als musulmans de Valencia” (Castell Maiques, Vicente: Proceso sobre la ordenación de la Iglesia Valentina entre los arzobispos de Toledo, Rodrigo Jiménez de Rada, y de Tarragona, Pedro de Albalat: (1238-1246) , Valencia, Corts Valencianes, 1996)

I aixina va ser. En l’art. II de la capitulacio firmada en Russafa, publicà per Huici, diu: “Los moros que quisiesen permanecer en el término de Valencia se quedarían salvos y seguros bajo la protección del rey, y deberían ponerse de acuerdo con quienes tuviesen las heredades”. Els qui havien conseguit donacions, ya que segons la “Crónica” s’havia promes mes terra de la disponible, a pesar que molts se’n tornaren als seus origens, ya que molts vingueren per la bula de la predicacio de la “Creuada” del papa Gregori IX, i alcançar les gracies espirituals. Per aixo obligaven, despres de les disputes dels nobles aragonesos en el rei (ya que consideraven que les terres de Valencia, eren una continuitat patrimonial seua), a vendreles rapidament a un musulma, ya que per a mantindre la propietat, haurien d’assentar-se en la ciutat, en cas contrari les pedrien. Hi ha que recordar que ya en temps del Cid, els cristians del sigle XI eren billingües. Un fet destacable es el Campeador, según fonts araps, com la “Primera Crónica General de España” (R. Menéndez Pidal, II, Madrid 1955, p. 587 a 588), despres d’apoderar-se de Valencia en 1094, “encargó de la custodia de sus puertas y murallas a peones cristianos de los almoçàraves que eran criados en tierras de moros”, ya que “fablavan assy como ellos et sabien sus maneras et sus costumbres”.

Un atre testimoni del nostre parlar s’ha replega en Al-Mudajaxax , El Cairo, Tom I, pag. 14. L’autor Ibn Sida, mort en Denia en l’any 1066, en el prolec de la seua obra Kitab al Muyasas , un diccionari analogic, en el que agrupa paraules que se referixen a una mateixa especialitat, demana disculpes per les incorreccions que puga fer al escriure en arap, afirmant: “¿Com no he de fer-les –si escric en temps tan alluntats de quan l’arap es parlava en purea– i tenint que conviure familiarment en persones que parlen romanç”. Tambe destaquen les de Abu Bakr Mamad, ibn Ahmad, ibn Ruhaim de Bocairent, qui afirma al parlar de les harges, “llengua cristiana” al seu mig d’expressio.

En la Cronica de Bernat Desclot, valencià (A. Ubieto: “B. Desclot: un historiador valenciano recuperado”, O. R. V ., Tom II, pp. 227-236). En l’apartat 312 diu: “E quant foren a 1.ª font que es dejus la roca del castell, dix l’alcayt a Don Pelegri que’l esperas I poch, que ades l’auria. E mentre que ell l’esperava, vee que se despuylava la almexia que vestia, e assech se en la font, e baya’s e gita’s l’aygua dessus. E quant se fo banyat, envia messatge a Don Pelegri. I [un] sarray quisabia notre latí”, que era de Cullera (cap. 312). D’atre moro de Villena diu que “era latinat” (cap. 411).


Els Furs del Regne de Valencia varen ser escrits originariament en llati. Despres Jaume I ordenà que es traduiren a la llengua que el poble parlava: el “Romanç”. Ell els revisà, els aprovà, els signà i els jurà el 7 d’abril de 1261. Cent cinc voltes apareix en els Furs “... arromançat per lo senyor rey...”; mai no es nomena un atre idioma, sencillament, perque no existia. I especialment significatiu en “De sentencies, d’actes, de citacions...”. Diu: “Los jutges en romanç diguen les sentencies que donaran, e donen aquelles sentencies scrites a les parts que les demanen”. I es que, per mes que es distorsione la realitat, mai es podra fer ciencia per el fonamentalisme, en tot cas, dogmatisme.